Nos colamos en la luna de miel de ensueño de Claudia Ula, la hija de Raquel Revuelta, en Indonesia: villa de lujo, mucho amor y paisajes paradisíacos

El pasado 21 de junio, Claudia, la hija pequeña de Raquel Revuelta, se dio el "sí, quiero" con su novio Vicente Benítez en una boda de ensueño frente al mar gaditano, en Zahara de los Atunes. Tras el gran día, el ya matrimonio puso rumbo a su merecida luna de miel, esos días tan necesarios para desconectar del estrés y los nervios de los preparativos. El destino no podía ser otro que un recorrido por varios rincones de Indonesia, donde están disfrutando a tope.

Así lo ha ido contando ella misma a través de sus redes: "Hoy nos hemos levantado temprano para marcharnos de Uluwatu hacia Labuan Bajo, a una hora en avión. En Labuan nos recogía un barco en el que pasaremos los próximos tres días recorriendo las Islas de Flores. La tripulación del barco nos había preparado un super lunch, y cuando hemos comido nos hemos puesto a hacer un trekking en Kelor Island, con vistas increíbles. Después, snorkel en Manjarite Island. Y hemos acabado el día viendo cómo salen de Kalong Island al atardecer los miles de murciélagos", explicaba después de su primer día en el paraíso del sudeste asiático. Alucinados con esta parte del mundo, confesó: "Vivo entre Lilo & Stitch, Mohana y las Sirenas de Mako".

Durante cuatro días, recorrieron las Islas de Flores a bordo de un barco solo para ellos, donde pasaron tres noches con una tripulación que los trató de maravilla. "Nos han llevado por sus islas, hemos hecho snorkel y visto las tortugas más grandes que he visto nunca", cuenta Claudia. Además, disfrutaron de trekking para contemplar atardeceres espectaculares, como el de la isla de Padar, y conocieron a los famosos dragones de Komodo. Para rematar, exploraron las playas paradisíacas de la isla.

Claudia y Vicente sellaron su amor en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, en Zahara de los Atunes, en una emotiva ceremonia rodeada de familia y amigos. La hija de Raquel Revuelta deslumbró con un vestido de corte sirena diseñado por Victorio & Lucchino —que incluso estuvieron presentes durante el enlace— rindiendo así homenaje a sus raíces sevillanas. El vestido estaba confeccionado en capas de crep, gasa y tul.