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Beatriz Cortázar entrevista a Carmen Tello en el 91 cumpleaños de Curro Romero: "Me necesita para todo porque soy sus pies y sus manos"

Curro Romero y Carmen Tello

Este domingo 1 de diciembre Curro Romero cumple 91 años. El torero ha pedido que no haya fiesta ni flamenco ni amigos de toda la vida o nietos de esos amigos que suelen apuntarse al plan. Esta vez El Faraón de Camas está muy afectado por la tragedia que tantas personas han padecido en Valencia con la Dana y ha pedido a su mujer Carmen Tello que nada de celebraciones porque no tiene el cuerpo para alegrías. Precisamente es Carmen quien nos habla de Curro, de su vida juntos y de cómo están pasando esta etapa de la madurez en su historia de amor

"Hay días que sin complicados", nos confiesa Carmen Tello. La esposa de Curro Romero comparte en esta entrevista con Beatriz Cortázar las últimas informaciones sobre el estado de su marido y nos cuenta que está muy triste con la tragedia de Valencia y que no va a celebrar mucho su 91 cumpleaños. "hay que estar muy pendiente" de él "porque depende totalmente por sus problemas de movilidad y hay que trasladarlo o en silla de ruedas o entre dos personas ya que sólo no puede". También tiene el problema de la vista "debido a una degeneración macular y cuando llega el atardecer ve muy mal y por eso pasa malos ratos cuando no reconoce a la gente y se agobia mucho", nos dice. Pero también nos cuenta que "hace ejercicio todas las mañanas" y que "tiene mucha fuerza de voluntad", aclara. "Ahora me necesita para todo porque soy sus pies y sus manos", reitera.

Beatriz Cortázar: El año pasado hubo gran celebración por los 90 de Curro Romero y hasta documentales para festejarlo. ¿Cómo van a celebrar los 91 y cómo se encuentra el maestro?

Curro llega a los 91 bien dentro de lo que cabe porque ha tenido sus problemas de salud. Hay que estar muy pendiente porque depende totalmente por sus problemas de movilidad y hay que trasladarlo o en silla de ruedas o entre dos personas ya que sólo no puede. También tiene el problema de la vista debido a una degeneración macular y cuando llega el atardecer ve muy mal y por eso pasa malos ratos cuando no reconoce a la gente y se agobia mucho.

¿Cómo está de ánimo?

Curro es un hombre que se cuida muchísimo cuando sale a la calle, cuida el escaparate como yo digo. No quiere llevar ni una arruga, ni un botón flojo de la chaqueta, ir bien peinado, hacerse las manos… Es muy cuidadoso de su imagen por eso lleva tan mal no poder andar bien ya que el físico le preocupa y eso es porque tiene muchas ganas de vivir. Hace ejercicio todas las mañanas ya que tiene mucha fuerza de voluntad. A diario está en la bici estática por las piernas…

¿Cómo lleva que le rindan homenajes como ha ocurrido recientemente?

No es una persona que le guste mucho los homenajes y menos ahora que no puede ver bien a las personas. Días atrás le dedicaron uno en el festival benéfico que hace la Hermandad de los Gitanos y el hermano mayor le llamó para darle un tributo y además sabían que la gente a la llamada de Curro responde en seguida. Es un hombre tímido y te aseguro que no le gusta llamar la atención pero todo Sevilla y gente de fuera respondió porque estaba la plaza llena y muchos esperándole para saludarle.

¿Es consciente de que está casada con un mito?

Por lo menos un mito en Sevilla porque aquí le adoran. Soy muy consciente de que el personaje es Curro y yo sólo soy su mujer. Trato de cuidarlo lo mejor que puedo pero a estas edades te aseguro que hay días que son complicados dado que hay momentos mejores y peores.

¿Qué queda de su historia de amor con el paso de los años?

Hoy veo nuestra historia de otra manera. Nos queremos muchísimo pero evidentemente ahora Curro necesita de mi atención para que no le falte nada y estar al día de sus cuidados médicos. Con los años las personas se ponen más caprichosas y aunque sé que me quiere muchísimo lo que siento es que me necesita para todo porque soy sus pies y sus manos.

"No tiene cuerpo para fiestas ni para festejar"

¿Y a usted quien le cuida? Siempre ha estado pendiente de sus padres, de su amiga Cayetana Alba, de Curro…

Soy una mujer fuerte físicamente hablando aunque también voy cumpliendo mis años. Es verdad que siempre he estado con personas más mayores como Cayetana pero era una mujer muy vitalista y yo la acompañaba siempre que me llamaba. Es verdad que no me he ocupado mucho de mí y espero que algún día lo mismo que yo he hecho lo hagan conmigo. Creo que el que siembra recoge pero hoy la vida va muy deprisa y cada uno tiene sus ocupaciones. Espero tener suerte y que al menos me echen un vistazo cuando lo necesite.

¿Cómo van a celebrar el aniversario?

Curro está muy afectado por todo lo que ha pasado en Valencia. Ve mucho la televisión y le ha impresionado a tal nivel que esta vez ha dicho que no quiere reuniones con amigos ni flamenco. Siempre nos juntamos porque le adoran y vienen todos pero ya ha dejado claro que no hagamos nada porque no tiene cuerpo para fiestas ni para festejar. Está muy preocupado por tantas desgracias y al final iremos a comer con sus dos hermanas y con su hija Conchita que va a venir desde Madrid para estar juntos todos incluso con su nieto Oliver. Será muy familiar y sin festejos. Curro disfruta mucho cuando está con sus dos hermanas porque se llevan fenomenal.

¿Qué le va a regalar a Curro?

Las cosas materiales no le hacen ilusión. El disfruta más cuando estamos todos juntos. Ese es su mejor regalo.

¿Cómo pasarán la navidad?

Curro y yo no salimos la noche del 24 y nos quedamos en casa. Tenemos muchos almuerzos estos días y el día de Navidad sí comemos con mis hijos.

Eran los íntimos de la duquesa de Alba y nunca fallan en su funeral. Esta vez ha estado hasta su hijo Carlos además de Fernando y Cayetano. ¿Qué pensaría Cayetana?

Ha sido una misa funeral especial por su X aniversario. La recuerdo a diario porque era irrepetible con una personalidad y generosidad de corazón con la gente que quería. Tenemos contacto con Alfonso (Díez) que suele venir por Sevilla y con su hijo Cayetano estamos muy unidos desde que organizamos el monumento tan bonito que le realizaron en la Hermandad de los Gitanos. A Carlos y Fernando hacía mucho que no los veíamos. Estuvieron muy cariñosos con Curro. Fue muy bonito cuando el sacerdote pidió a los hijos que se juntaran para rezar la Salve a su madre. Imagino que Cayetana desde el cielo estaría feliz viendo a sus hijos juntos y a sus amigos rezando por ella. Ella siempre quiso que sus restos descansaran en Sevilla, era su ilusión y delante del Cristo de la Salud.

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