La dimisión de Íñigo Errejón como como diputado y portavoz de Sumar y su abandono de la política insitucional llegó después de que una denuncia en redes terminara apuntando directamente a él. "El indignado social nunca saca la cabeza los días del 8M, ni cuando hay algún caso de abuso sexual. Intuyo sabrá que puede estallarle en la cara cualquier día. Hay detalles que prefiero no contar pero si alguna mujer se lo topa quiero que sepa que no está loca, que es un verdadero psicópata y que sus aires de persona normal esconden un verdadero monstruo", escribía esta mujer de forma anónima.

No era la primera vez que una denuncia en redes salpicaba al expolítico, pero sí la primera que ha tenido consecuencias. Esta denuncia fue compartida el miércoles por la periodista Cristina Fallarás, desencadenando todo lo demás. El propio Errejón confirmó a Sumar y Más Madrid que las acusaciones contra él eran ciertas antes de presentar su dimisión.

Cristina Fallarás sigue compartiendo en Instagram denuncias anónimas contra Errejón. Una de ellas dice así: "Yo con Errejón estuve hace años cuando estaba con Rita Maestre. Hace ya menos años, yo tenía un hijo y pareja, empezamos a hablar por Insta porque nos seguíamos la pista. Un día hablamos de quedar a tomarnos una cerveza. Lo primero que hizo fue abrirme un whatsapp por Telegram, yo no entendí nada. Luego me invitó a su casa insistentemente. Cuando le dije que no, me bloqueó y nunca más supe de él. Hola, aliade". Errejón salió con la que fuera compañera de su partido hasta 2015 tras alrededor de cinco años de relación de idas y venidas. Incluso en 2011 le dedicó unas palabras en su tesis.

Otra denunciante también escribe: "Todo lo que pasó con Íñigo fue de manera virtual en una relación de cibersexo, pero el trato que sentí fue desagradable y degradante, sentí una fuerte relación de poder hacia mi persona, como si yo no importara nada, ni mi deseo ni mis necesidades. Sentí que era un objeto y que él ejercía poder sobre mí sin importarle en absoluto mi persona".

Otras acusaciones recogidas por Fallarás en las últimas horas también hablan de un "militante y asesor de Más Madrid" y de otro "cargo público de un partido de izquierdas".

Hay que recordar que horas después de que Errejón comunicara su dimisión (sin pedir perdón a las mujeres afectadas y sin hacer referencia directa a las acusaciones de violencia machista contra él pese a reconocer sus comportamientos), la actriz Elisa Mouliaá dio un paso al frente y dijo ser también una víctima del expolítico. "El denunciado cerró con pestillo la puerta, para impedir que la denunciante pudiese escapar comenzando a besar y a tocar a la dicente por distintas partes de su cuerpo", se lee en una parte de la denuncia, presentada este jueves por la presentadora en la Comisaría Central del Cuerpo Nacional de Policía de Madrid.

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