Los rumores de crisis entre Jennifer Lopez y Ben Affleck surgieron el pasado mes de marzo, cuando no aparecieron juntos en la Met Gala. A partir de ese momento, el goteo de informaciones sobre su posible divorcio fue incesante, más aún cuando pusieron a la venta su mansión de Beverly Hills, un casoplón donde establecieron su vida solo diez meses después de casarse, y que les ha durado bien poco. La casa, no obstante, sigue en el mercado inmobiliario.
Fue el pasado mes de junio cuando trascendió que la cantante, de 55 años, y el actor, de 52, ya no vivían juntos y que el casoplón se había colado en Zillow.com, página web dedicada al negocio de los bienes raíces. El precio por el que saltó al mercado era de 60 millones de dólares, unos 55 millones de euros, pero ahora, está a la venta por 68 millones de dólares, es decir, cerca de 63 millones de euros.
La casa ocupa unos 4.000 metros cuadrados y en su interior cuenta con habitaciones, un garaje para 15 vehículos y aparcamiento para 80. También posee piscina, jardín, bar y un complejo deportivo al aire libre con pistas de baloncesto y pickleball, gimnasio y ring de boxeo. El terreno es de 2,4 hectáreas y posee varias entradas privadas para asegurar la privacidad. Además, en la compra viene incluido no solo el edificio principal, sino también una casa adyacente para huéspedes.
Sin embargo, pese a los lujos que ofrece la vivienda, no consiguen quitársela de encima, algo para lo que el cofundador de The Oppenheim Group Jason Oppenheim encuentra una explicación. En Realtor.com explicó que la artista y el intérprete no deben preocuparse por la lentitud del proceso, ya que "habría sido sorprendente que la casa se vendiera en menos de 100 días". Daily Mail recoge sus palabras: "La mayoría de las casas de esta magnitud están en el mercado durante seis meses y, en muchos casos, durante mucho más tiempo".
La espera por la venta depende de una serie de factores, como que el grupo de compradores potenciales es mucho más pequeño debido a los enormes gastos financieros. Las personas adineradas también dedican un tiempo a mirar diversas propiedades, a la espera de encontrar rebajas o una opción que les satisfaga del todo. Los gastos mensuales estimados giran en torno a los 283.666 dólares, unos 261.997 euros, que el propietario afronta en impuestos, costes de seguridad y cuotas de la asociación de propietarios. También a la venta, por un precio comparable de 65 millones de dólares, está la casa de Beverly Hills llamada The Peak, que ha estado en el mercado durante más de dos años.
Por el momento, el actor cerró el pasado mes de julio el pago de un depósito de garantía por una mansión en Pacific Palisades, exclusivo barrio residencial a las afueras de Los Ángeles, entre las montañas de Santa Mónica y el océano Pacífico. La casa está valorada en 20,5 millones de dólares, es decir, casi 19 millones de euros.
Por su parte, la intérprete de On the Floor fichó hace unas semanas Azria Estate, una conocida mansión ubicada en Holmby Hills. La artista negoció para rebajar el precio de la vivienda de 55 millones a un rango de 30 y 39 millones. La vivienda dispone de 12.000 metros cuadrados y tiene capacidad para 14 habitaciones. Dispone de varios jardines, un invernadero, una sauna, una piscina, una sala de cine, una habitación de juegos y una casa para huéspedes.
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