Donald Trump se ha salido con la suya. El juez Juan M. Merchan retrasó este viernes la sentencia por el soborno de la actriz porno Stormy Daniels, que estaba prevista para el próximo 18 de septiembre, hasta el 26 de noviembre, 20 días después de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
Con esta decisión, los estadounidenses irán a las urnas sin saber si el candidato republicano acabará en prisión, ya que se enfrenta a cuatro años de cárcel. No obstante, en casos como los de Trump no es común que termine bajo rejas. Lo habitual es que quede en libertad o que reciba una multa.
A finales de mayo, el expresidente fue condenado por falsificar registros comerciales para ocultar el pago de 130.000 dólares a la ex actriz porno Stormy Daniels, a cambio de que guardara silencio. Ese mismo mes, un jurado decidió que Trump era responsable de 32 cargos graves por falsificación de documentos, con el fin de silenciar a la actriz y proteger su campaña presidencial de 2016.
El juez ya aplazó la sentencia del político, prevista inicialmente para el 11 de julio. Hace dos meses, el Tribunal Supremo emitió una decisión que otorga a los presidentes una fuerte protección frente a ser procesados penalmente por las acciones que realizan como parte de su labor oficial. Por su parte, Merchan fijó como fecha para la condena el 18 de septiembre y para pronunciarse sobre la inmunidad, el 16 de septiembre. Finalmente, tras la petición de Trump de retrasar la sentencia hasta después de las elecciones, la nueva fecha para conocer la resolución del caso será el 26 de noviembre.
Trump celebra el aplazamiento de la sentencia
El expresidente y el candidato republicano ha celebrado el aplazamiento de la sentencia por el caso de la exactriz porno Stormy Daniels. "La caza de brujas del fiscal de Manhattan ha sido pospuesta porque todo el mundo se da cuenta de que no hay caso. ¡No hice nada mal! Se trata de un ataque político en mi contra por parte de la camarada Kamala Harris y otros opositores de izquierda radical con fines de interferencia electoral, y es un caso que nunca debería haber sido presentado", manifestó Trump en un evento junto a un potente colectivo de policías en Carolina del Norte.
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