La del lunes fue una noche muy especial para la marquesa de Griñón, premiada en los ELLE Style Awards 2024. Un galardón que recibió de manos de su madre y ante la atenta mirada de su marido, Iñigo Onieva. El empresario no quiso posar en el photocall ante los fotógrafos pero sí apoyar a su mujer entre bambalinas y ella le devolvió el gesto dando la cara por él tras la última polémica de su nuevo restaurante, que acumula a diario decenas de bolsas de basura en las puertas: "Eso es culpa del Ayuntamiento, se lo tenéis que preguntar a otra persona", respondió.
Tamara Falcó se hizo la 'sueca' ("Que los vecinos se quejan, ¿por qué?") y tiró balones fuera, señalando al alcalde Martínez Almeida de los problemas en la gestión de residuos de Casa Salesas. Un inconveniente que ha generado las protestas e indignación de los residentes del barrio, no solo por la imagen que ofrece del mismo tener decenas de bolsas de basura en plena calle sino también por la higiene y la peligrosidad, pues muchas de esas bolsas contienen botellas de cristal.
No solo la marquesa dio la cara por Iñigo y su nuevo restaurante. Isabel Preysler, que fue la encargada de entregarle el galardón a su hija este lunes, aseguró: "El restaurante de Íñigo me encanta. Se come muy, muy bien, fenomenal. Yo creo que más bien barato, está muy bien de precio".
Él, por su parte, no quiso atender a polémicas y cedió el protagonismo a su esposa, a la que felicitó con un romántico mensaje a través de redes sociales: "Orgulloso de mi maravillosa mujer. Me inspiras cada día".
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