Depresión crónica y graves problemas económicos. La vida de Dulce Delapiedra está en las antípodas de aquel personaje que vimos en los platos de Telecinco. "He tomado pastillas para dejar de vivir... Quería dormir y no despertarme", ha declarado en una entrevista desgarradora a la revista Lecturas.
Hace solo un mes, Telecinco, a través de su web, recordaba a la tierna nanny, que llegó a convertirse en una estrella de la cadena cuando fichó por Supervivientes en 2016. Echaban un vistazo a su Instagram, donde Dulce compartía fotos y se declaraba una "superviviente de la vida".
Sin embargo, lo que muestran las redes es solo la superficie. En su entrevista, Dulce lanza palabras durísimas: "Quería dormir y no despertarme. Es de la forma que quiero irme. No me arrepiento (de haber tomado pastillas) y quisiera tener más valor". Es el durísimo testimonio de Dulce, quien fuera la niñera de Isa Pantoja. "Estoy en las últimas. Hoy mismo me iría con mi madre (falleció cuando ella era una niña)", publica la revista.
"No tengo ningunas ganas de vivir. Tengo una depresión crónica desde 2005, desde Marbella, y estoy en tratamiento (...) Mi situación económica ya me ha matado", continúa Dulce, que asegura cómo es su vida ahora: "Llevo un año cobrando un subsidio para mayores de 52 en paro. Es de 480 euros. No me da ni para pagar los 730 del alquiler." Y añade: "Vivo en 30 metros cuadrados".
Se define a sí misma como "una manirrota". Llevó a sus cinco sobrinos a Eurodisney después de Supervivientes. Recibe ayuda, pero no se trata de Isa Pantoja. Aunque sí reconoce que cuando se lo ha pedido, la hija de la tonadillera le ha echado un cable.
Se enfrenta Dulce a un pago de Hacienda de 16.000 euros después de haber liquidado su deuda de 60.000 euros, "los que tenía para vivir". "¿No ves que yo jamás había tenido que pagar a Hacienda, que ganaba muy poco?", se desahoga y recuerda los 30 años que trabajó en la casa de Isabel Pantoja. "Ganaba muy poco, 30.000 pesetas. Y cuando querían era de la familia y cuando querían no".