El momento del incendio en la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva el pasado 8 de julio se convirtió en lo más comentado del enlace del año. Por culpa de unas velas traviesas, la sotana del padre José Luis empezó a arder en plena ceremonia.
Unos días después, gracias a las redes sociales, hemos podido ver en vídeo el surrealista instante en el que la hermana del novio, Alejandra Onieva, actuó como bombera y evitó una gran tragedia.
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Los internautas se han percatado de la cara de incredulidad de la hija de Isabel Preysler y han recordado todas las situaciones 'gafe' que ha vivido la marquesa de Griñón en plenos preparativos de su matrimonio. "Lo peor de todo es que Tamara tuvo que explicarle a Dios que casi quema a un cura y aún así la boda no se canceló", se lee entre los comentarios del vídeo.
Cabe recordar que Tamara tuvo gastroenteritis tras un viaje preboda a Indonesia; se hizo un esguince en su despedida de soltera; tuvieron que retrasar la fecha inicial de la boda por el nacimiento de la primogénita de su primo Álvaro Falcó e Isabelle Junot y hasta recurrir de urgencia a Carolina Herrera para el vestido de novia porque Sophie et Voilà, la firma que había elegido para que la vistiera ese día, le dejó plantada.
A día de hoy todo es anécdota. Tamara y su marido están disfrutando en Sudáfrica, concretamente en Ciudad del Cabo, del inicio de su viajazo de luna de miel, que está previsto que durará un mes. Si es que no deciden volver a España por el fallecimiento de Marta Chávarri, la madre de su primo Álvaro Falcó.