Olivia de Borbón será la nueva Duquesa de Sevilla, título con Grandeza de España que hereda de su padre, Francisco de Borbón Escasany, fallecido en Madrid el pasado 20 de mayo a los 82 años. Su hermano Francisco aspiraba a ostentar el ducado, como parecía ser el deseo de su padre. Sin embargo, la Ley de Igualdad de Títulos Nobiliarios, aprobada en 2006, confirmó el derecho de muchas mujeres aristócratas que, siendo primogénitas, veían cómo los títulos de sus padres pasaban a sus hermanos varones, aunque estos hubieran nacido después.
Por tanto, Julián Porras-Figueroa, esposo de Olivia y padre de sus dos hijos, Flavia y Fernando, será duque de Sevilla, eso sí, como consorte. Casualidad o no, coincidiendo con la solicitud del Ducado de Sevilla por parte de Olivia, su marido acaba de anunciar el lanzamiento de su propia marca de ropa masculina, a la que ha bautizado como Blackroan. En su comunicado, Julián explica que, por el momento, la firma presentará únicamente colecciones cápsula disponibles en línea. No obstante, también ofrecerá un servicio de sastrería a medida, confeccionado por un equipo de sastres de probada experiencia y absoluta confianza. A partir de septiembre, la dirección de contacto para clientes será su propia vivienda: un chalé adosado en La Finca, donde reside el matrimonio con sus hijos desde que dejaron su casa en Marbella hace ya unos meses. Todo apunta a que Porras-Figueroa, como nuevo duque consorte, lucirá en sus camisas el símbolo del Ducado de Sevilla bordado en ellas, una práctica habitual entre miembros de la nobleza. Un botín de guerra, en este caso.