Marius Borg se ha convertido en la pesadilla de la Casa Real noruega. El hijo mayor de Mette-Marit, mujer del príncipe Haakon, salta de nuevo a los titulares. Esta vez, por dinero. El que le reclama su novia después de sufrir graves destrozos en su piso de Oslo.
Dos detenciones de la policía (el 4 de agosto y el 10 de septiembre), denuncias de agresión por parte de su novia, de saltarse la orden de alejamiento y un cuchillo clavado en una pared, según trascendió a la prensa noruega: el escándalo le pisa los talones.
Tras la primera detención, Marius fue denunciado por su chica también por los desperfectos ocasionados en su casa. No solo la pared, también una lámpara rota. Más todo lo que tuvo que ser reparado y la factura de la empresa de limpieza que se hizo cargo de poner orden en la vivienda. Total de gastos: 25.500 euros, según publica Semana, que cita como fuente al canal noruego TV2 Norge. La demandante solicita al joven, de 27 años, que se hago cargo de los gastos.
También hemos conocido que la mujer del heredero al trono se puso en contacto con la víctima para mostrarle su preocupación y evitar el daño que este violento episodio podía causar a la corona.
Marius se ha convertido en el tormento de la familia. A sus 27 años ya ha protagonizado varios escándalos, como un ingreso en prisión por un delito de tráfico de drogas, un escándalo de seguridad nacional por revelación de imágenes de la Familia Real o un delito contra la seguridad vial hace escasos meses.
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