De los reyes Carlos y Camilla a Lady Gabriella Windsor: arranca la Royal Ascot sin Kate Middleton

A penas tres días después del Trooping the Colour 2024, Carlos III ha vuelto a reunir a su familia para la primera jornada del Royal Ascot, a excepción de la princesa de Gales. A falta de Kate Middleton, todas las miradas se han dirigido a Lady Gabriella Windsor que, desde el fallecimiento de su marido, Thomas Kingston, a finales de febrero, no había aparecido en ningún acto público.

El empresario fue hallado muerto a los 45 años en la casa de sus padres en Gloucestershire con una "herida traumática en la cabeza" producida por un arma de fuego. Casi cuatro meses después de este traumático episodio, Gabriella ha recuperado la sonrisa. La hija de los príncipes de Kent ha reaparecido este martes por la puerta grande después de que Carlos III le concediese el privilegio de hacer su entrada a este compromiso entre la alta sociedad del Reino Unido en carruaje. En concreto, son cuatro las calesas tiradas por caballos que llegan con todos los honores.

Seguida del rey Carlos y la reina Camilla, que ocupaban el primer carruaje junto a los duques de Wellington, Lady Gabriella aparecía en el segundo, en compañía de la princesa Ana. Con una sonrisa de oreja a oreja, la viuda de Kingston lucía un vestido de estampado floral y una pamela de organza en color naranja con pendientes dorados de perlas.

La escritora recibió el cariño de los presentes en el hipódromo del condado de Berkshire. En especial, de Zara Tindall, la hija de la princesa Ana, con quien se fundió en un cálido abrazo en su llegada. Tindall, muy asidua a las celebraciones de Ascot, acudió con un vestido midi en tonos pálidos y amarillentos, combinado con una cartera de mano blanca y un sombrero de rafia natural.

Por su parte, la reina Camilla ha optado por un look en azul de dos piezas con flores en los bordes, la tradicional pamela que exige el dress-code y un magnífico broche de perlas que perteneció a la reina Victoria de Reino Unido, formado por zafiro y diamantes.

Entre los invitados destacaba también otro royal, Philippos de Grecia, hijo de Constantino y Ana María y primo del rey Felipe VI. El príncipe acudía junto a su esposa, Nina Flohr, que lucía un vestido de Adam Lippes también en color amarillo.