Días intensivos para la reina Letizia. La consorte termina este viernes su viaje de cooperación en Guatemala, donde ha mostrado su lado más solidario y ha apoyado diversas iniciativas. Tras 48 horas de pura devoción, la esposa de Felipe VI pone rumbo a España en el A-310, un exclusivo avión privado de la Fuerza Aérea Española.
El avión de lujo donde la madre de la princesa Leonor y la infanta Sofía descansa de su viaje solidario tiene sala de reuniones, cocina propia, duchas para refrescarse y hasta dos dormitorios disponibles para la consorte o para parte de su equipo. En definitiva, todas las comodidades que te imagines para afrontar 12 horas de vuelo.
Asimismo, el hotel sobre las nubes de doña Letizia posee paredes recubiertas de madera y dispone de una gran seguridad gracias a su blindaje, capaz de desviar un misil lanzado contra la aeronave.
El avión reúne 62 plazas de primera clase y pesa alrededor de 160.000 kilos. Además, tiene 46 metros de largo y 15 de alto. Además, este transporte VIP de la consorte alcanza una velocidad de 900 kilómetros por hora.
Los miembros de la Casa Real no son los únicos que utilizan este lujoso avión con normalidad, ya que también lo usa la Presidencia del Gobierno. Asimismo, se ha destinado para evacuaciones médicas dentro y fuera del territorio nacional.
Este viaje de la reina Letizia a Guatemala ha sido su noveno viaje de cooperación en solitario. Con un look idéntico al del primer día (jeans verdes, camisa blanca, chaleco cooperante y botas anchas), doña Letizia se volcó este jueves con los niños y mujeres de riesgo, interesándose por todos los proyectos de mejora que se desarrollan.
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