Con una sonrisa estelar, un look de alfombra roja y como una estrella que es. Meghan Markle, enfundada en un blanco brillante de Louis Vuitton, brilló como un destello de luz en la gala Ripple of Hope que se celebró el martes 6 por la noche en Nueva York. Los duques de Sussex fueron distinguidos por su activismo contra el racismo un año después de haber hecho público el episodio que vivieron en el seno de la familia real sobre el color de piel de la actriz y de su hijo, Archie. Noche de glamour máximo con una cena benéfica cuyas mesas se vendieron a un millón de euros, según publica The Sun. Esto, un día antes del estreno mundial en Netflix de su docuserie.
Con su potente presencia, Meghan arrasó en la gala, organizada por Kerry Kennedy, sobrina de John F. Kennedy e hija de Robert F. Kennedy, quien además dirige la Fundación RFK en honor a su padre, en defensa de los derechos humanos y la salud mental.
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La duquesa de Sussex apareció cubierta bajo un paraguas con un impecable vestido blanco hielo diseñado para ella por el director creativo de Louis Vuitton, Nicolas Ghesquière, ex director de la casa de Balenciaga, según Vogue. Quiso la actriz brindar un guiño a la princesa Diana luciendo un anillo de esmeraldas de su joyero. Meghan se agarraba del brazo de su marido, que no se separaba de ella ni un milímetro. Durante la cena, Harry le pasaba el brazo por el hombro. Todo un gesto de apoyo, protección y complicidad.
Los duques, que evitaron hablar con la prensa, sí pronunciaron unas palabras en el escenario de la gala para agradecer el premio por su lucha contra la "opresión y la injusticia". "Cada vez que un hombre defiende un ideal o ataca la injusticia, lanza una ola de esperanza", dijo Harry. Pero, ante todo, la prensa británica ha remarcado la palabra "comienzo": "Este honor no es solo la culminación de una vida de trabajo, para nosotros de alguna manera es el comienzo."
"No salimos mucho", dice Harry
Con un tono más relajado, el príncipe bromeó sobre el evento como si hubiera sido una cita para él y su mujer: "Pensé que solo íbamos a tener una cita nocturna, así que me pareció bastante extraño que estuviéramos compartiendo el espacio con 1.500 personas". No salimos mucho estos días porque nuestros hijos son muy pequeños, así que esto es muy inesperado".
La actriz, en tributo a Robert F. Kennedy, destacó: "El sueño perdurable de RFK de un mundo justo y en paz es mucho más que una simple esperanza". Justo esta distinción les llega a horas del mega estreno mundial de la serie documental de Netflix. Un polémico serial en el que lanzan acusaciones a The Firm, hablan de "una jerarquía familiar", de "las filtraciones y los datos falsos" y revelan un sonado "juegan sucio".
El hijo de Carlos III y su mujer fueron galardonados por su papel de "líderes ejemplares" por "su compromiso inquebrantable" para contribuir a los cambios sociales del mundo. Los antecesores en recibir este reconocimiento fueron, entre otros, Joe Biden, los ex presidentes Barack Obama y Bill Clinton y su mujer, Hillary, y Bono de U2.
Un gala benéfica, cuyas mesas se vendieron hasta por un millón de dólares (960.000 euros). El cubierto más económico alcanzaba los 2.500 dólares (2.390 euros), publica el diario británico. Entre los invitados al evento se encontraba Alec Baldwin.
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