Industria
Fernando Roig rescata con una quita de 135 millones a la azulejera Bestile, proveedor de Pamesa
Ángel C. Álvarez
Valencia,
Fernando Roig, hermano del presidente de Mercadona Juan Roig y socio minoritario de la cadena de supermercados, ha logrado convertirse en la última década en el líder indiscutible del azulejo, una de las industrias más exportadoras de España.
Y lo ha hecho convirtiendo a su grupo, Pamesa, en el mayor productor de baldosas cerámicas de Europa, pero también como socio y financiador de otros fabricantes castellonenses. Una de las empresas que han crecido en estos años a la sombra de Roig es Bestile, que ha contado con préstamos del empresario desde 2014 y destina buena parte de su producción a Pamesa.
Una relación que ha llevado a Roig a acudir el rescate de Bestile en varias ocasiones y aportar dos préstamos de 299 millones de euros en 2022, en plena crisis por los precios del gas con la guerra de Ucrania. La azulejera llegó a registrar unas pérdidas de 133 millones de euros ese ejercicio. Una situación que incluso empeoró en 2023 al desplomarse sus ingresos un 57,7%, hasta 112 millones de euros, y hacer inviable el pago de la deuda.
Ante la crisis de su proveedor, controlado por el empresario Celso López y con 600 trabajadores, el dueño de Pamesa se ha vuelto a erigir en el salvador de la cerámica, con un acuerdo de reestructuración financiero que ha pasado por perdonar a la azulejera 135 millones de euros, algo más del 45% de la deuda que mantenía.
Una empresa en dación en pago
El pacto también incluyó que Portovan, la sociedad holding de Roig, se quedase como dación en pago la sociedad Samim Tiles Spain, cuyos activos se valoran en 93,8 millones de euros, según reflejan las cuentas de 2023 de Bestile. Fuentes de Pamesa explicaron que el traspaso de esa sociedad incluye fundamentalmente como activos varios inmuebles industriales productivos en Alcora y Onda, localidades en que se ubican las plantas de Bestile. Por último, el acuerdo mantiene una parte de la financiación a Bestile, con dos préstamos que suman 70 millones de euros, uno participativo por 40 millones y otro ordinario por otros 30 millones.
Según explican desde el grupo de Roig, el respaldo a Bestile se debe a que le unen "relaciones comerciales históricas" y esa línea de financiación, por lo que ante el "grave deterioro de su situación financiera" por la crisis por la guerra de Ucrania se optó por cerrar un acuerdo de reestructuración "conforme a estándares habituales en el sector", con una combinación de medidas que incluye refinanciar "una parte de la deuda considerada sostenible". Se da la paradoja que la quita de deuda permitió a Bestile cerrar 2023 con un resultado contable positivo de 113 millones de euros, por los extraordinarios generados, pese a esas dificultades financieras.
Las cuentas de Bestile recogen que el 47% de su facturación en 2023 procedió del grupo de Roig. La firma había invertido 90 millones entre 2021 y 2022 para abordar su crecimiento y el de su mayor cliente. Otra muestra de la estrecha relación entre ambas es que Pamesa cedió a Bestile la gestión y comercialización de las plantas de Azuliber, que había adquirido en 2021.
El precedente de Mercadona como acreedor
Fernando Roig, dueño también del Villarreal Club de Fútbol, sabe lo que es recurrir a préstamos de empresas vinculadas para hacer frente a momentos difíciles. En 2022 usó esta fórmula con Mercadona como financiador, que le aportó 250 millones de euros. Una deuda que Roig ya liquidó a finales del año pasado y la que ya había recurrido en 2012 y por el mismo importe, entonces por el descenso del Villarreal a Segunda División.