Industria

Indra pone en marcha la integración con Escribano con el visto bueno del Gobierno

De izquierda a derecha Ángel y Javier Escribano

Antonio Lorenzo, Javier Romera

Indra pone en marcha la integración con Escribano para crear un gigante de la defensa y contrata a KPMG para sacar adelante la operación. La empresa que preside Ángel Escribano se plantea la compra de EM&E Escribano, a través de intercambio de acciones, con el objetivo de reforzar la capacidad de la multinacional tecnológica española en el ámbito de la defensa. La operación se gesta con un elemento insólito en la alta empresa: las negociaciones se realizan entre dos hermanos, Ángel y Javier Escribano, presidentes de Indra y de EM&E, respectivamente. Las negociaciones para la integración de las dos compañías, adelantada por Expansión y ABC, han sido respaldadas por otras fuentes a este diario. "Tiene todo el sentido", reconocieron semanas atrás, pero enmarcado entonces en el ámbito de la especulación.

El proyecto de consolidación en el sector de defensa aportaría músculo en un sector de actividad llamado a convertirse en receptor de multimillonarias inversiones, especialmente tras el compromiso del Gobierno de incrementar las inversiones en seguridad y defensa hasta el 2% del PIB, con un gasto adicional de 10.471 millones de euros a lo largo de este año.

En la actualidad, Escribano controla el 14,30% de Indra, por lo que una eventual integración de las dos compañías permitiría a la empresa con sede en Alcalá de Henares elevar su peso accionarial en la multinacional cotizada, siempre en función de la prima que se abone. En ese supuesto, todo apunta que se produciría una ampliación de capital en Indra para afrontar la referida transacción. No obstante, la decisión final de los consejos de Indra y Escribano no podrá contar con la presencia de los dos hermanos, ya que deberían ausentarse de las deliberaciones y votaciones. La valoración de Escribano, según confirman distintas fuentes, se situaría en el entorno de los 1.000 millones de euros.

Dos gigantes

Indra se ha fijado como objetivo facturar 5.200 millones de euros este año, lo que supondría un aumento del 11% respecto al ejercicio anterior y Escribano Mechanical & Engineering (EM&E) ha contratado a Boston Consulting Group (BCG) para que le ayude a elaborar un plan estratégico a cinco años con el objetivo de triplicar su facturación. Según explican fuentes de la compañía, con una cartera de pedidos que supera los 1.200 millones de euros, el objetivo consiste en facturar cerca de mil millones de euros en el próximo lustro.

El crecimiento de Escribano, de hecho, está siendo vertiginoso. En 2019 facturaba 44 millones; en 2023, de acuerdo con las últimas cifras publicadas en el Registro Mercantil, alcanzó ya los 115 millones de euros. En adelante, gracias al boom de la industria de la defensa a nivel mundial, la previsión apunta a llegar a los 400 millones de euros. Y es algo que lejos de frenarse, irá a más tras la exigencia del presidente de EEUU, Donald Trump, a sus aliados de llevar a cabo una mayor inversión.

Inversión en Indra

Tras la última inversión de EM&E en Indra, la empresa familiar indicó que, en el contexto geopolítico actual, el grupo EM&E refleja con esta apuesta "su firme compromiso con el crecimiento y desarrollo de la industria tecnológica y consolida su presencia en los sectores estratégicos de defensa, aeroespacial y de seguridad, fortaleciendo sinergias con Indra, actor clave en estos ámbitos".

EM&E espera ingresar este año 300 millones de euros, de los que más de un 60% corresponden al mercado internacional, por lo que su mayor presencia en Indra le permite aumentar su influencia para satisfacer la alta demanda global "de estaciones de armas remotas, sistemas de guiado de munición, soluciones antidrón, robots, así como sistemas de vigilancia de fronteras, soluciones en las que es un referente europeo e internacional".