El Santander perderá 8.500 millones tras dotar 1.500 millones por los ajustes en Europa

El Banco Santander cerrará el ejercicio 2020 con unas pérdidas de 8.500 millones de euros, según el consenso del mercado de Factset, frente a los 6.515 millones que ganó un año antes. No obstante, el beneficio del grupo financiero verá reducidas las pérdidas en 500 millones de euros, frente a los números rojos de 9.000 millones que obtuvo a cierre del tercer trimestre del año.

Según apuntan los analistas de Renta 4, el banco cargará a los resultados de 2020 una partida de entre 1.500 y 1.700 millones de euros para financiar gastos de reestructuración que tiene pendientes. La entidad ya puso en marcha en el último trimestre del año pasado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 3.573 empleados en España, el 13% de la plantilla.

Además, tal y como anunció el grupo el pasado mes de octubre, también prepara nuevos ajustes en el resto de mercados europeos (Alemania, Reino Unido, Polonia y la filial de crédito al consumo, Santander Consumer Finance) con el objetivo de ahorrar mil millones de euros al año, una vez se hayan digerido los costes de reestructuración.

Respecto a los ingresos, el grupo verá reducido significativamente el margen de intereses, ganando un 9,8% menos por esta vía, hasta los 31.857 millones por los efectos del tipo de cambio en los países del continente americano en los que opera, a excepción de Chile y Brasil para los que se espera crecimiento. Por la vía de las comisiones ingresará 9.990 millones de euros, lo que también supone una caída brusca, del 15,2%, respecto al año anterior, por la volatilidad de los mercados durante la pandemia. Así, aunque los analistas confían en que la entidad impulse los ingresos a través del resultado de operaciones financieras (ROF), no será suficiente para consolidar el margen bruto que se situará 5.150 millones por debajo de un año antes.

Sin embargo, en cuanto al capital (medido por el ratio CET 1), los analistas prevén que alcance el 12% a cierre de diciembre, mejorando respecto al 11,8% de septiembre gracias a la generación de beneficio neto en el cuarto trimestre y a la deducción de intangibles de software, compensando de este modo el consumo de capital en el trimestre por aumento de los activos ponderados por riesgos y los costes de reestructuración.

La entidad cerrará 2020 con una rentabilidad sobre activos propios (ROE) del 5,43%, 1,17 puntos porcentuales menos que hace un año, según el consenso del mercado, siendo uno de los bancos españoles que menos ha visto dañada su rentabilidad a pesar de la pandemia. El grupo podría recuperar el nivel precrisis de cara a 2022.

Único en pérdidas

El Santander será el único de los bancos cotizados que cerrará el año 2020 con pérdidas tras el golpe del segundo trimestre del año, cuando obtuvo unos números rojos históricos de 10.798 millones por los ajustes de 12.600 millones que realizó a consecuencia del deterioro del fondo de comercio de sus filiales y de los activos fiscales diferidos en España.