La OCDE alerta sobre el gasto en pensiones por la revalorización de Escrivá
- Alerta del gasto extra que supondrá la indexación con la actual inflación
- Esta misma semana, Cormann pidió suspender la revalorización de este año
José Miguel Arcos
Madrid,
El análisis de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) no se ha centrado únicamente en los grandes rasgos del PIB o la inflación. Su secretario general, Mathias Cormann, también avisa sobre la "necesaria" consolidación fiscal. De forma directa, el organismo internacional alude a la reforma de pensiones realizada por la cartera de José Luis Escrivá, que introdujo la indexación de las pensiones al IPC para mantener el poder adquisitivo.
"La introducción del mecanismo para compensar la pérdida de poder adquisitivo de las pensiones apoyará los ingresos de los hogares, pero también aumentará el gasto público en el periodo de proyección", explican. La actual inflación prevista por el organismo (8,1%) nada menos que duplica el crecimiento esperado del PIB (4,1%), si bien el mercado laboral aún mantendrá su ritmo para surtir de cotizaciones a la Seguridad Social.
De hecho, la OCDE dio un rapapolvo al ministro Escrivá esta semana cuando opinó que la revalorización "debería suspenderse" al menos este año. Escrivá, a cambio, señaló que "hicieron un análisis muy precipitado" sobre la indexación de las pensiones al IPC.
Según recoge el informe realizado por la OCDE, "es necesaria una estrategia de consolidación a medio plazo basada en la revisión del gasto para empezar a reducir gradualmente el déficit fiscal y la relación entre la deuda pública y el PIB".
Los números rojos de la Seguridad Social se redujeron con fuerza en 2021. El déficit mermó más de lo previsto el año pasado y cayó al 0,93% del PIB, 11.192 millones de euros a cierre del año pasado. Es el más bajo desde 2013 y tres décimas menos de lo estimado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Actualmente, está habiendo un aumento récord de las cotizaciones por la mejora del empleo tras la caída de la pandemia. De hecho, el aumento del 7,4% de las cotizaciones sociales elevan los ingresos de esta partida hasta casi 46.000 millones de euros en el primer trimestre del año.
Ahora, la indexación por ley de las rentas de los pensionistas al IPC para recuperar el poder adquisitivo será un desequilibrio por la partida del gasto debido a la inflación extraordinariamente elevada que amenaza con sumar entre 10.000 y 13.500 millones de euros extra de gasto en pensiones únicamente el año que viene, con recargo en los Presupuestos de 2023. Estos cálculos han sido elaborados por casas de análisis privado como Fedea, o autoridades públicas como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) o el Banco de España (BdE).
Pese al avance considerable de la partida de los ingresos no financieros, la Seguridad Social seguirá en déficit en 2023. Este "fuerte aumento del gasto en pensiones por la evolución del IPC", alertó también la AIReF elevará el gasto en pensiones un 8,8% y dejará el déficit de la Seguridad Social en un 0,5% pese a las transferencias de gastos impropios y el alza de las cotizaciones recogido en el Mecanismo de Equidad Intergeneracional.