Banca y finanzas

First Republic sufre una sangría de depósitos: pierde casi el 60% en un trimestre

  • La entidad ha afirmado que recortará su plantilla entre un 20% y un 25%

Álvaro Moreno, Víctor Ventura

First Republic Bank ha publicado hoy sus cuentas y ha dado un dato que ha puesto sobre aviso al mercado. La que fuera una de las víctimas de la crisis bancaria ha reconocido una caída de sus depósitos del 40% en el primer trimestre del año, a los que hay que sumar casi un 20% adicional del rescate de emergencia que recibió y que debe devolver en tres meses. Estos ahorros se han recortado de golpe de 176.000 millones de dólares hasta los 104.500 millones, pero, según la entidad, se han estabilizado desde entonces.

Lo más preocupante es que esa cifra incluye los 30.000 millones que los gigantes de la banca estadounidense han depositado en las arcas de la compañía como parte de un rescate orquestado por el Gobierno de EEUU. Sin esos 30.000 millones, los ahorros que resguarda habrían caído en un 57%, 100.000 millones menos en un solo trimestre, unas cifras de terror para cualquier entidad financiera.

La entidad ha afirmado que recortará su plantilla entre un 20% y un 25% en el segundo trimestre para adecuarse a su nueva realidad. La entidad local tenía el último año un número de empleados superior a los 7.200. Además, el banco ha reconocido que está buscando "opciones estratégicas" para "acelerar su progreso y reforzar su posición de capital". Entre estas opciones incluyen reducir el tamaño de su hoja de balance o reducir la cantidad de préstamos para mantener liquidez.

El principal motivo detrás de esta decisión es el enorme desequilibrio que se ha generado en sus cuentas. Los préstamos no se han recortado, sino que han crecido, hasta 173.000 millones, obligándoles a pedir 80.000 millones en préstamos a corto plazo a otros bancos y entidades financieras para compensar el agujero provocado por la fuga de depósitos. Hace un año, el banco no tenía ni un solo dólar en préstamos a corto plazo, que son los que suponen un riesgo más inmediato para cualquier entidad bancaria.

Respecto a los resultados en sí mismos, la firma ha logrado unos ingresos de 1.209 millones, superando casi en 100 millones lo previsto. Sobre los beneficios netos, estos han sido de 269 millones, batiendo con creces con las estimaciones del mercado que apuntaban a 0,51 dólares la acción, frente a los 1,23 dólares que ha logrado finalmente. Sin embargo, sus beneficios han caído desde los 401 millones del año pasado, aunque han logrado contener la caída por encima de las estimaciones. El resultado ha sido el desplome de la acción frente a sus activos: ha pasado de valer 2,2 veces su valor en libros a valer solo un 20%.

Una víctima más

First Republic Bank estuvo en el ojo del huracán tras la quiebra de Silicon Valley Bank y Signature Bank. Parecía evidente para todos los analistas que su elevada exposición a activos con más riesgo la convertía en la 'víctima ideal' para engrosar las filas de las quiebras tras un éxodo masivo de sus clientes. Sin embargo, la empresa pudo aguantar la complicada situación con un rescate exprés pactado entre los grandes bancos del país y el Gobierno.

JPMorgan, Citigroup, Bank of America, Wells Fargo, Morgan Stanley y PNC inyectaron cerca de 30.000 millones de dólares que la entidad local prometió devolver pasados 120 días. Antes de esto, las principales agencias calificadoras del país rebajaron sus notas hasta BB desde A- con claras advertencias al mercado. De hecho, desde S&P afirmaron que "creemos que el riesgo de una retirada de los depósitos es elevado a pesar de las acciones de los reguladores".

Toda esta situación ha llevado a la compañía a una auténtica locura bursátil los últimos meses. De hecho en lo que va de año se ha desplomado un 86,8%, con caídas del 89% solo en los primeros días de marzo, cuando estalló la crisis de la banca. Desde entonces el valor ha repuntado más de un 30%, pero aún está en niveles muy lejanos al colapso de SVB. Pese a todo, la compañía mantiene un valor en el parqué cercano a los 2.979 millones de dólares.