Aragón

Los trabajadores de Lear en Épila protagonizan una caravana de coches para defender sus empleos


    Eva Sereno

    La plantilla de la empresa Lear en Épila han recorrido varias localidades zaragozanas de la comarca de Valdejalón para defender el mantenimiento de la actividad en la factoría y de los cerca de 350 puestos de trabajo ante la confirmación de que la planta no producirá los nuevos asientos para el nuevo Opel Corsa, que se fabrica en Opel España en Figueruelas (Zaragoza). En las Cortes de Aragón se ha aprobado una proposición no de ley para que el Gobierno de Aragón medie en el conflicto.

    Los trabajadores de la planta de Lear en Épila (Zaragoza) han salido hoy a la carretera con una caravana de coches con la que han recorrido los principales municipios de la comarca de Valdejalón, en la que viven muchos de los empleados de la empresa, con el fin de dar a conocer la situación que se atraviesa en la factoría al no haber participado en el proceso de adjudicación de la producción de los asientos para el nuevo modelo Opel Corsa, que se fabrica en la planta de Opel España en Figueruelas (Zaragoza).

    Una situación que pone en peligro alrededor de 350 puestos de trabajo, ya que esta adjudicación supone alrededor del 80% de la carga de trabajo de esta planta zaragozana, que tendría actividad hasta octubre del año 2018.

    Esta situación ha sido dada a conocer en la caravana de coches que han realizado los trabajadores de Lear con la que han recorrido diferentes municipios como La Almunia donde han sido recibidos en la alcaldía, además de haber mantenido un encuentro con la presidencia de la comarca de Valdejalón, según han explicado fuentes de CCOO Aragón a elEconomista.es

    La caravana de coches también ha recorrido otras localidades y mantenido encuentros con representantes de los ayuntamientos como Épila, Calatorao, Salillas, Lumpiaque, Urrea, Plasencia y Bardallur para finalizar en Figueruelas, a las puertas de Opel España, donde han sido recibidos por el comité de empresa y por representantes de las secciones sindicales de otras compañías auxiliares del sector de la automoción.

    Con esta movilización los trabajadores quieren reivindicar que se mantengan los puestos de trabajo y la actividad en la planta o bien que se busquen otras alternativas como realizar otras cargas de trabajo de la multinacional o procedente de otras compañías. Además, también apuntan otras posibles soluciones como la subrogación de la empresa y el traspaso de los trabajadores a Johnson Controls, que será la encargada de producir los asientos para el nuevo Opel Corsa.

    De momento, los trabajadores de Lear están a la espera de más noticias por parte de la empresa y de la celebración de una próxima reunión con la dirección, que podría celebrarse el día 1 de julio, aunque todavía no se ha recibido ninguna comunicación al respecto.

    Apoyo de los grupos políticos

    Dentro de las acciones llevadas a cabo por los trabajadores, además de la caravana de coches y las movilizaciones, figuran encuentros en los últimos días con grupos parlamentarios de las Cortes de Aragón y con la consejería de Economía del Gobierno de Aragón.

    Unos apoyos a los que ahora se suman las Cortes de Aragón en cuya sesión plenaria se ha aprobado una proposición no de ley, que ha sido respaldada por los siete grupos parlamentarios con representación, con el fin de que el Ejecutivo aragonés medie en este conflicto y se pueda buscar una solución satisfactoria.

    En concreto, en la proposición no de ley se propone al Gobierno de Aragón que se vele por los derechos de los trabajadores previstos en la legislación laboral vigente para aquellos que se vean afectados por los despidos y que se faciliten medidas menos traumáticas. También se insta a que se pongan en marcha otros mecanismos en la comunidad para que el empleo sea estable y de calidad y se evite la precarización.

    Todos los grupos han querido, además, mostrar su apoyo a los trabajadores. Desde el PP, el diputado Ricardo Oliván, ha reiterado el compromiso del parlamento aragonés con los empleados de Lear y el apoyo del PP a la continuidad de esta factoría, mientras que desde el PSOE, la diputada Isabel García, también se ha mostrado a favor de mantener la actividad en esta planta, aparte de criticar la precarización en el empleo.

    Desde el PAR, Jesús Guerrero, ha apuntado a la elaboración de un plan industrial para mantener el empleo a partir de 2018 y de un plan social para tratar las consecuencias que puedan derivarse de un posible cierre. Además, Javier Martínez, de Ciudadanos, ha destacado el impacto de la actividad de Lear no solo en los empleos directos, sino también en los negocios que se han desarrollado en la comarca y las afecciones que puede tener el cese de la actividad en la factoría en todo el territorio.

    La diputada de IU, Patricia Luquin, ha incidido en la situación de los trabajadores, muchos de los cuales superan los 45 años de edad y la dificultad que tendrían para volver al mercado de trabajo, mientras que desde CHA, Gregorio Briz, ha abogado por hacer un gran esfuerzo para mantener la planta y, desde Podemos, Román Sierra, ha recordado que ya se hizo en ERE en el año 2010 en esta factoría.