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¡Deshazte de la temida barriga!

¿Quieres deshacerte de la odiada barriga? Lo sabemos, no resulta tarea fácil y más cuando tendemos a acumular grasa en esas zonas... Sin embargo, que sea complicado no significa que se convierta en algo imposible. Sigue éstos consejos y conseguirás perder esa zona de grasa localizada que tanto odias.

Los milagros no existen, y las dietas que nos prometen reducir las zonas que más 'quebraderos de cabeza' nos dan en pocas semanas además de no ser demasiado saludables nos hacen correr el riesgo de recuperar en pocos meses - e incluso en pocas semanas- lo que hemos conseguido durante las mismas. Lo cierto es que basta con comenzar a adquirir pequeños hábitos que se conviertan en una 'filosofía de vida' en nuestra alimentación para tener éxito en con este propósito. ¡Sigue estos consejos que nos da la revista Sport Life y luce 'tipazo' este verano!

1. Realiza varias comidas al día

En las dietas no hay trucos. Es decir, para conseguir adelgazar hay una máxima muy sencilla: si gastas más de lo que ingieres adelgazas. Lo cierto es que ésto es real y podemos conseguirlo a través del aumento de ejercicio o de la disminución de la ingesta de alimentos calóricos. Pero, ¿cómo debemos de realizar éstas comidas? Además de restringir los alimentos de alto contenido en calorías debemos realizar varias comidas a lo largo del día.

Ésto es muy importante, pues si restringimos nuestras comidas a dos o tres diarias nuestro metabolisto será mucho más lento, lo que se traducirá en que éste guardará lo que reciba a modo de 'reserva'. Por este motivo, debemos evitar que transcurran largos espacios de tiempo entre comidas de tal manera que debemos acostumbrarnos a ingerir pequeñas cantidades en cortos periodos de tiempo.

2. Cuidado con las grasas saturadas

Las grasas son necesarias y por ello no debes eliminarlas de tu dieta. Pero ojo. Debes elegir bien antes de consumirlas. Opta por las grasas sanas tipo monoinsaturadas (aceite de oliva, frutos secos), y poliinsaturadas (pescados de aguas frías) y controla los alimentos ricos en grasas saturadas.

3. Practica deporte

Practicar deporte 3 o 4 veces por semana no sólo es algo fundamental para conseguir nuestro objetivo, sino que es un hábito tremendamente saludable que todos deberíamos practicar por salud y no por estética.

El ejercicio cardiovascular nos ayudará a disminuir esos kilos de más y a mantener nuestro peso de manera más controlada. Deportes como bicicleta, footing, patinaje, etc, son opciones muy recomendables, sobre todo ahora que la primavera ha llegado y las temperaturas nos permiten desarrollarlos. Otros como pilates nos ayudan a endurecer y son específicos para la zona del abdomen, así como brazos y piernas.

4. Olvida las dietas drásticas o el deporte demasiado intenso

Lo único que conseguirás con estas dietas extremas y con el aumento de ejercicio de manera exagerada es perder peso de manera rápida, pero correr el riesgo de recuperarlo de la misma manera que lo has perdido: a toda velocidad. Evita las dietas 'yo-yo' y 'tómate tu tiempo' para perder esos kilos de más, ya que te ayudará a incluir estos hábitos en tu día a día de manera que conseguirás mantener el peso deseado.

Además, con el ejercicio de manera desmesurada, especialmente el cardiovascular, conseguirás perder sobre todo al principio grandes cantidades de agua que también son fáciles de recuperar.

5. ¡Ojo cuando las calorías 'no son lo que parecen'!

Seguro que hemos pensado en numerosas ocasiones: "¿por qué engordo sino como muchas cantidades?" Muchas personas, en efecto, no ingieren grandes cantidades de comida y sin embargo engordan. ¿La clave? No saben escoger bien los alimentos.

Lo cierto es que muchos snack no llegan a saciarnos y sin embargo poseen un alto contenido calórico. Este es el caso de algunos refrescos que pueden llegar a aportan hasta 150 calorías. De la misma manera, otros refrigerios como una tapa a medio día, las famosas galletas dietéticas o barritas de cereales pueden poseer 'calorías escondidas' que nos impidan llegar a nuestro objetivo.

6. Apuesta por las infusiones

Las infusiones son una gran alternativa para ingerir entre horas y no poseen calorías de más como el caso de los refrescos. Prueba a ingerirlas en momentos en los que no te sientes saciado.

Puedes encontrar multitud de variedades a tu gusto: tés con vainilla, canela, frutos del bosque, con sabores traídos de oriente... U otras infusiones como el poleo menta o la manzanilla, que resultan muy digestivas.

7. Tratamiento quirúrgico... No gracias

Las operaciones quirúrgicas están cada vez más demandadas, sobre todo en el caso de las liposupciones, operaciones que nos permiten deshacernos de la molesta grasa localizada y que nos prometen no volver a recuperarla. Y es que es este tipo de intervenciones se extraen las células de grasa que 'le sobran' a esa parte de nuestro cuerpo, y por las que tenemos un exceso de volumen en esa zona.

Sin embargo, esta no es la solución y no podemos pretender continuar con el mismo estilo de vida, y perder esos kilos sobrantes a golpe bisturí. ¡Cambia tus hábitos de vida y verás como funciona!

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