Transportes y Turismo

La nueva Marina d'Or también da un giro a su plantilla: ERE, cambios de contratos y externalizaciones

Varios hoteles de Marina d'Or.

elEconomista.es, Europa Press
Valencia,

El complejo turístico de Marina d'Or ha cambiado de dueños, de nombre y de estrategia para reabrir este verano bajo la nueva imagen de Magic World. Unos cambios que ahora han llegado a la plantilla del resort, que ya había sufrido un recorte en 2022 cuando aún estaba en manos del fondo Farallon.

Entre las medidas que los nuevos dueños y gestores quieren implantar tras su fuerte inversión de 40 millones para renovar instalaciones se encuentran cambios en la estructura laboral y en las condiciones de su plantilla, en un sector y en una empresa que los últimos años ha estado muy marcada por la temporalidad y el recurso a los Ertes. De hecho parte de la plantilla ya se encontraba en un expediente temporal.

Así, Magic World plantea un ERE que, según la empresa, afectará solo al 7% de trabajadores y que en su mayoría supone un cambio en la modalidad de contrato actual. Así, a la mayoría de esos afectados, cerca del 65%, se les propone "un cambio de modelo de contrato con categoría de fijo discontinuo para evitar despidos y conservar el mayor número de puestos de trabajo", según recoge Europa Press de fuentes del Grupo Fuertes y Magic Costa Blanca.

En la misma línea, los propietarios han optado por externalizar algunos de los servicios del complejo para "garantizar el éxito" de un proyecto. En su nacimiento de la mano de Jesús Ger y durante décadas Marina d'Or englobó actividades tan diversas que iban desde la propia construcción y reformas, al mantenimiento de los jardines, la venta de apartamente, catering para terceros o su propia televisión.

Montaña de pérdidas

La empresa justifica estas medidas estratégicas para hacer frente a las pérdidas acumuladas por los anteriores propietarios y desvela que en 2023, a pesar de la recuperación del sector, el resort generó pérdidas de aproximadamente 15 millones de euros. Unos 'números rojos' que explican el apresurado cierre a mitad de septiembre de los hoteles que ordenó el anterior dueño, el fondo Farallon, mientras se cerraba la venta. De hecho, en 2022 la empresa ya realizón un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó a 106 trabajadores bajo la gestión de Farallon.

Desde la pandemia y como ha venido informando elEconomista.es, la filial hotelera de Marina d'Or no ha dejado los 'números rojos' desde la pandemia y prácticamente acumula 100 millones de euros de pérdidas de 2020 hasta su venta a finales del año pasado. Farallon se convirtió en el dueño de Hoteles Marina d'Or con la compra de la deuda que la empresa mantenía, una operación de capitalización con la que también entró en el accionariado de forma minoritaria Sareb, uno de los acreedores histróricos de Marina d'Or.

La compañía defienden que estas medidas son "imprescindibles" para garantizar los puestos de trabajo y la viabilidad de la empresa. "Estas iniciativas buscan garantizar la continuidad de más de mil empleos directos, así como de muchos otros puestos de trabajo indirectos", aseguran.