Transportes y Turismo

La compra de TAP por Lufthansa presiona a IAG en las rutas a América

  • Esperan cerrar la operación a principios de 2023
  • La alemana es la mejor posicionada para la compra

Lucía Gómez

Las aerolíneas europeas siguen en pleno proceso de consolidación y la siguiente en la lista es TAP Portugal, firma de bandera del país vecino. Según publicaba hace unos días el diario luso Expresso, el grupo mejor posicionado para hacerse con la compañía aérea es Lufthansa que, paralelamente, se encuentra en un proceso de cambio de accionistas, ya que le Ejecutivo alemán quiere deshacerse de un 7% de su capital, la mitad de su participación. Si esto finalmente ocurriese tal y como se da por hecho en el mercado, IAG -matriz de Iberia, Vueling y British Airways, entre otras- se vería presionada sobremanera en sus conexiones de largo radio que conectan Europa con América, claves para ellos.

Con 17 millones de pasajeros en 2019, último año antes de la llegada de la pandemia, TAP Portugal no compite con IAG como compañía -salvo el caso particular de algunos destinos en países de Latinoamérica-, pero el hecho de que un gigante como Lufthansa pueda hacerse con el hub de Lisboa y comenzar a competir desde allí, puede hacer perder competitividad al de Madrid, en manos de Iberia y Air Europa - de la que la primera ya tiene un 20% del capital-.

Esto sería especialmente relevante dada la red de conexiones de corto y medio radio que nutren, tanto a TAP como a Lufthansa, para llenar sus aviones de largo recorrido y que podrían hacer que la balanza del viajero se decante hacia el lado luso en vez de hacia el español o el británico.

Durante 2019, TAP Portugal representó más del 50% de las llegadas y salidas en el Aeropuerto Internacional de Lisboa, si bien en el caso de Madrid y de Iberia, este porcentaje era bastante similar, pero se quedaba muy lejos de los que tienen otras aerolíneas de bandera en sus principales aeropuertos de referencia.

Coincidencias de rutas

TAP Portugal, desde su hub de Lisboa y con sus 94 aviones (106 antes de la llegada de la pandemia), conecta el país vecino con importantes ciudades de Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica, donde destaca Brasil, culturalmente ligado de forma muy relevante a Portugal.

Es precisamente en estas rutas, sobre todo las de Estados Unidos y Brasil, en las que los vuelos del Grupo Lufthansa y los de TAP Portugal, se solapan con los de IAG -sobre todo en el caso de Iberia-.

Lo mismo ocurre, aunque de forma diferente, con el caso de las conexiones con México o Venezuela, donde además existen otras terceras opciones para viajar desde el sur de Europa.

A ello, habría que sumarle la competencia de otras aerolíneas del Grupo Lufthansa, como es el caso de la suiza Swiss, o del Grupo IAG, como British Airways o Aer Lingus, que hacen conexiones, principalmente, con el mundo anglosajón.

Números rojos

Pese a la recuperación del tráfico que está viviendo el sector, las cuentas de la compañía siguen en números rojos, si bien estos se han reducido notablemente con respecto al ejercicio anterior. En concreto, las pérdidas fueron de 80 millones de euros gracias a la vuelta del turismo, clave para la aerolínea. El Gobierno luso reconoció justo antes del verano que la compañía cerraría el ejercicio 2022 en pérdidas y no llegaría a beneficios hasta 2025.