Sanidad

Fernando Prados: "Tenemos ya más de 1.000 pacientes ingresados y nos llegan entre 100 y 150 diarios"

  • "somos unos privilegiados, porque estamos junto al almacén de material"
Fernando Prados, coordinador general del Hospital de Ifema. Foto: eE

Javier Ruiz-Tagle

En un tiempo récord, la Comunidad de Madrid consiguió imitar la proeza de Wuhan: levantar un hospital de la nada y dotarlo de todas las instalaciones necesarias para atender a pacientes con coronavirus. Su coordinador general, Fernando Prados, cuenta cómo es allí el día a día.

¿Cómo y cuándo se llega al convencimiento de que hacía falta construir un hospital como éste?

Esto está dentro del plan B que tenía la Consejería cuando a mí me llamaron para que colaborara en esta pandemia. Me contactan para coordinar los hoteles medicalizados, para solventar el miedo objetivo que significaba trasladar a aquellos pacientes desde el centro hospitalario porque tuvieran mejor cuadro. Ya teníamos en la cabeza que podíamos tener que llegar a más, porque los hoteles tienen sus limitaciones. Entonces fue cuando pensamos en una estructura de este tipo, porque aquí se podían establecer todos los servicios que necesita cualquier paciente, no solo los más leves. Hemos colaborado con gente que ha trabajado en coordinar la sanidad en lugares de catástrofe. Tenemos la mejor sanidad, pero si se satura se puede volver ineficiente y ineficaz.

¿Qué es los que tienen a su disposición los pacientes?

Ifema es un hospital que hemos hecho para poder derivar los pacientes que están en el resto de hospitales para que éstos puedan funcionar con mayor normalidad. Tenemos camas para enfermos de Covid-19 y podemos ofrecerles todos los servicios que necesitan para su manejo, desde la radiología, con equipos portátiles y fijos, a un espacio de laboratorio y el miércoles mismo estrenamos 16 camas de UCI para aquellos pacientes que se deterioran, como estamos viendo en los hospitales. Esto es un instrumento más del sistema. Los pacientes que vienen aquí de los hospitales lo hacen para poder recibir la atención que necesitan. Eso sí, es un hospital monográfico para este tipo de pacientes. Es verdad que en un primer momento solicitamos a los hospitales que nos enviasen a los pacientes que pudieran tener mejor pronóstico, porque no teníamos aún las unidades de UCI, pero ahora ya podemos decir que a este hospital se pueden derivar a cualquier paciente de Covid-19, siempre acorde a las dimensiones que tenemos.

¿Cuál es la situación que se vive ahora en este hospital?

Ahora mismo tenemos más de 1.000 pacientes ingresados. Se están produciendo altas de forma continua, este jueves vamos a volver a batir el récord con 121 personas. Los ingresos está rondando entre los 100 y los 150 diarios. Este es el día a día, nuevos ingresos, nuevas altas y también vamos creciendo diariamente a un ritmo de 150 o 200 camas.

¿Y con cuánto personal sanitario cuentan?

El miércoles hubo unos 950 sanitarios entre los tres turnos que tenemos habilitados: mañana, tarde y noche. La mayoría de ellos se concentran en los turnos de mañana y tarde y son médicos, enfermeros y auxiliares de atención primaria, que están apoyados por médicos hospitalarios, por adjuntos y residentes de la especialidad de medicina interna. El personal de UCI lo forman internistas y anestesistas del sistema sanitario, ya fueran de la privada, de la pública o del sistema de emergencias y por la noche tenemos personal del Summa, del Samur y también de atención primaria para la vigilancia de los pacientes.

Decía hace un momento que ya tenían 16 camas de UCI. ¿Las tienen ocupadas o se pueden derivar pacientes?

Nosotros dependemos de la Consejería y obraremos según determine, pero la idea de la UCI es que los hospitales puedan derivarnos todo tipo de pacientes con coronavirus, no solo a los de mejor pronóstico. Evidentemente, si algún paciente ingresado lo necesita se usa, pero en un principio los dos módulos habilitados son para derivar. También tenemos la posibilidad de crecer en puestos de UCI si vemos la necesidad.

"La situación real es que estamos en una pandemia, donde es necesario tener un nivel de protección para el que las empresas no tenían stock"

Ha habido mucha polémica entre los profesionales por no contar con equipos de protección. ¿Cómo están en Ifema?

La verdad es que somos unos privilegiados, porque estamos junto al almacén. Pero bueno, la situación real es que estamos en una pandemia, donde es necesario tener un nivel de protección para el que las empresas no tenían stock. Con lo cual, hemos tenido que pasar a un mercado en el que no estamos acostumbrados a movernos. Es normal que se haya producido durante un tiempo falta de algunas piezas de protección. En Ifema hemos respetado desde el primer día las recomendaciones que realiza el Ministerio de Sanidad. En un primer momento, cuando empezamos a recibir pacientes y solo teníamos habilitado el pabellón 5, las medidas de seguridad que tomábamos eran más duras de lo normal. Luego, al tener ya los otros pabellones habilitados, las relajamos y eso pudo provocar que algunos médicos se sintieran desprotegidos, pero las medidas de seguridad son las mismas que en cualquier hospital. Nunca hemos bajado de las recomendaciones del Ministerio y yo diría que estamos por encima.

Un hospital necesita mucha ingeniería. ¿Cómo está construido Ifema?

Cuando llegamos, lo primero que hicimos es ver qué posibilidades había. Solamente el realizar las tuberías para que llegue el oxígeno a cada uno de los puntos de esas 1.500 camas es ya una obra de ingeniería de un calado importante. Se pensó en poner un sobresuelo, un vinilo que fuera lavable, cómoda y con la asepsia necesaria para manejar a este tipo de pacientes. Los operarios de este recinto lo hicieron todo a una velocidad extraordinaria.