Qué significa llevar el bolso cruzado, según la psicología

El bolso para un hombre o una mujer, como bien sabemos, es mucho más que un accesorio para lucir en las salidas con los amigos, en una cita importante o en la discoteca. Es más, es capaz de transmitir mucho sobre la persona que lo lleva puesto, como sus aspiraciones, ambiciones, personalidad...

Por lo general, no solo es utilizado para llevar el maquillaje, las llaves, el monedero, el paraguas o el monedero, ya que puede provocar emociones diversas en las personas, como un 'chute' de autoestima, bienestar consigo misma o confianza en las calles.

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Existen diferentes tipos y cada uno expresa una serie de cosas, según varios expertos:

• Bolso a la espalda. Es una de las formas más habituales y seguras, sobre todo cuando buscamos distribuir el peso. Más allá de eso, se asocia con personas confiadas y despreocupadas, que no ven peligro a su alrededor.
• Bolso de mano. Es el menos práctico de todos, sobre todo si queremos llevar muchas cosas 'a cuestas'. Esta alternativa es propia de personas que pueden tener dificultades para resolver problemas de modo eficiente.
• Bolso cruzado. Con una correa diagonal, es la opción más inteligente. Reduce el riesgo de tirones, distribuye el peso de manera eficiente y mantiene el contenido del bolso a la vista. Suelen llevarlo personas precavidas, organizadas e inteligentes.
• Bolso recto. Es más cómoda que el de mano, pero sigue teniendo desventajas. Se asocia con personas con un alto nivel de inteligencia, que confían en que su entorno es seguro.

A tener en cuenta

Además de toda la información que la elección de un modelo u otro puede exhibir de la persona que lo lleva, también hay que tener cuidado, sobre todo en la actualidad, con qué bolso nos ponemos porque no a todo el mundo les favorece el mismo tipo.