Cambios en el dueño de Día: LetterOne reestructurará su consejo al levantarse las sanciones a Fridman
- El Tribunal de Justicia de la UE considera infundada su vinculación con Putin
- Los consejeros del fondo finalizan su mandato
- El magnate ruso podrá recuperar el control sobre la cadena de supermercados
Javier Romera
LetterOne, el fondo propietario del 77% de la cadena de supermercados Dia, acometerá en junio una reestructuración de su consejo de administración, una vez que se han levantado las sanciones al magnate ruso Mikjail Fridman, su accionista mayoritario, por sus supuestos vínculos con el régimen de Putin.
Según conta en la documentación remitida por la firma al Registro Mercantil de Luxemburgo, aunque el consejo se renovó el pasado mes de febrero, varios de sus miembros fueron nombrados por un periodo de apenas cuatro meses y las designaciones deben ratificarse porque tienen fecha de caducidad el próximo 15 de junio. Pendiente de ello están así Alexandre Gourlay, Anna Lisa Jenkins, Linda Poil, John Robinson, Jean Paul Mousel y David McGeough.
Tras la imposición de las sanciones en 2022 a varios de sus socios como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, LetterOne se enfrentó a un vacío de poder. Los dos principales accionistas del fondo, Fridman y Petr Aven, presentaron su dimisión para facilitar la continuidad de las operaciones. Fue un momento en el que anunciaron también su renuncia al cargo German Khan, Alexey Kuzmichev y Andrei Kosogov. La firma, presidida actualmente por Mervyn Davis y con Jonathan Muir como consejero delegado, ha mantenido en todo momento durante estos dos últimos años que sus fundadores "no tienen control ni influencia sobre Letterone", pero lo cierto es que la situación ahora a dado un vuelco.
Satisfacción en la firma
LetterOne aseguró ayer que "acoge con satisfacción la noticia de que el Tribunal de Justicia de la UE ha anulado la inclusión de Fridman y Aven en la lista de sanciones (...), dejando claro que las acusaciones eran infundadas y que no estaban justificadas", pero insistió al mismo tiempo en que, pese a que vuelven a ser los máximos accionistas, ya se realizaron el año pasado "cambios decisivos" con su salida, por lo que "no tienen ningún control ni influencia y no se les pagará ningún dividendo, si es que se les debe alguno". No obstante, habrá que esperar ahora al mes de junio para ver si vuelven o no a entrar en el máximo órgano ejecutivo. Dia no se ha pronunciado al respecto, pero ha mantenido en todo momento durante estos dos últimos años que ni LetterOne ni la propia cadena habían sido sancionados y que, por lo tanto, no se veían afectados.
Más allá de que Fridman vuelva o no al máximo órgano ejecutivo, LetterOne ha retomado la senda inversora y busca ahora, entre otros, proyectos energéticos en España. Aunque registró pérdidas de 7.853 millones de dólares en el último año (unos 7.300 millones de euros), la empresa asegura que cuenta con liquidez para acometer este nuevo plan de inversiones por valor de 7.700 millones de dólares (7.200 millones de euros). El consejero delegado asegura así en el último informe anual correspondiente a 2022 y que el grupo publicó a finales del año pasado que "gracias a nuestra fuerte liquidez de casi 8.000 millones de dólares, hemos seguido realizando inversiones prudentes por valor de 1.500 millones en los últimos seis meses".