La UE necesitará reducir las cabezas de ganado para lograr cumplir el compromiso de la COP26
- Según avisa un informe realizado por CE Delft para la Fundación Changing Market
- Se deben reducir las cabezas de ganado y mejorar la dieta europea para reducir las emisiones
- Un 53% de las emisiones de metano vienen de la ganadería y un 13% del sector energético
María Juárez
Quedan ocho años para lograr el objetivo pactado en la COP26. Cien países, entre los que se encuentran principalmente la Unión Europa y Estados Unidos, acordaron reducir las emisiones de metano en un 30%. Sin embargo, es poco probable que la UE consiga cumplir dicho objetivo sino reduce antes el número de cabezas de ganado.
En el caso europeo, el 53% de las emisiones de metano provienen del sector primario. Si la situación sigue como hasta ahora, las emisiones de metano solo se reducirán un 13,4% para 2030, es decir, caerán solamente en un 3,7%. Se lograría disminuir las emisiones de metano hasta un 34% si al menos el 10% de los consumidores europeos optaran por dietas más saludables donde se redujera el consumo de carne y de lácteos.
Por otro lado, existen medidas técnicas que ofrecen reducciones más pequeñas y menos fiables, como los aditivos para piensos que reducirían las emisiones entre un 1% y un 12% y la gestión del estiércol, incluida la producción de biogás, entre un 4% y un 7%.
La gran mayoría de las emisiones de la energía, el 86%, no se emiten dentro de las fronteras europeas, por ello, la cuota de emisiones de metano del sector energético dentro de la UE se limita al 13%. Según, el informe "Methane reduction potential in the EU", de CE Delft, un cambio en los estándares de emisión de metano para los productores de petróleo y gas, incluidos los que están fuera de Europa, podría reducir las emisiones de las importaciones de combustibles fósiles entre un 48% y un 87%. Sin embargo, esto no está incluido en las propuestas actuales de la UE.
El gran enemigo de la capa de ozono
En 2019, las emisiones de la UE fueron de 15,2 megatoneladas (Mt), según los datos de la Agencia Europea de Medio ambiente (EEA). Esto es aproximadamente un 5% de las emisiones mundiales.
El metano es un riesgo real que afecta al cambio climático. A nivel mundial se debe reducir un 30% de las emisiones, para evitar que las temperaturas globales asciendan 1,5ºC. El metano es un gas de efecto invernadero 80 veces más peligroso que el dióxido de carbono en un ciclo de 20 años.
Tal y como ha asegurado Nusa Urbancic, de Changing Markets, "la ganadería es el talón de Aquiles de la estrategia de Europa para el metano. Las emisiones de metano de las explotaciones ganaderas de la UE son equivalentes a las emisiones totales de 50 centrales eléctricas de carbón, pero las políticas que podrían generar recortes significativos, alentando un cambio a dietas más saludables con menos carne y lácteos, están completamente ausentes de los planes de la UE".