Política
Sánchez descarta la coalición pero ofrece a Podemos el control de "altas instituciones" del Gobierno
- La oferta consiste en la participación activa fuera del Consejo de Ministros
- Propone también un sistema de control para el cumplimiento del programa
- Sánchez basa en la desconfianza acentuada la imposibilidad de la coalición
María Medinilla
Pedro Sánchez ha propuesto este martes un camino intermedio para evitar elecciones que se define en tres aspectos: un acuerdo programático (excluyendo las políticas de Estado donde ambas formaciones chocan), un sistema de control para el cumplimiento de las medidas que incluya a organizaciones de la sociedad civil y la "participación activa en la gobernanza del país dentro de altas instituciones muy relevantes, que complementan la labor del Consejo de Ministros".
Ni Gobierno de coalición ni Gobierno en solitario. La propuesta que Sánchez ha lanzado a Pablo Iglesias durante la presentación de las 370 medidas que propone el PSOE para un Gobierno estable la estudiarán los equipos negociadores el próximo jueves, fecha que ha dado el socialista para la primera reunión tras el parón de la comunicación en agosto.
Sánchez, que ha basado el desencuentro en la "desconfianza acentuada" desde julio, ha propuesto la creación de una oficina de seguimiento del acuerdo, una comisión para el control del mismo desde el Senado y la inclusión en el acuerdo de gobernanza de la sociedad civil.
En un acto con aspecto de mitin, Sánchez ha apostado por explorar ámbitos de colaboración con Unidas Podemos, que pasan necesariamente por el apoyo a la investidura: "Construyamos confianza, construyamos garantías",ha lanzado.
Pocas horas antes de este anuncio, Pablo Iglesias ya advertía de que las 370 medidas no serían suficientes y que no iba a aceptar que se humillara a sus votantes con propuestas por debajo de la representación del partido. Después de comparecer Sánchez, el líder morado ha recuperado en Twitter un extracto de su entrevista esta mañana y lo ha transformado en una respuesta indirecta a la nueva oferta: "La política no puede basarse en la confianza, sino en las garantías. Un Gobierno de coalición es la única garantía para llevar adelante las políticas que pueden cambiar la vida de la gente. Eso es lo que está en juego. Y ese ha sido siempre nuestro compromiso".
Crónica de una muerte anunciada
La crónica de la muerte anunciada de cualquier nuevo intento de un Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos ha quedado hoy constatada. Los niveles de desconfianza a los que llegaron en julio se han vuelto insuperables para ambas partes.
Para Sánchez, "no fue un problema de ministerios". La negativa del PSOE a gobernar junto a los de Pablo Iglesias la justifica el socialista en el "Gobierno compartimentado y dividido" que buscaba Podemos y en las diferencias en asuntos de Estado, como Cataluña, entre los dos partidos.
No encuentra justificación, sin embargo, en ir a unas nuevas elecciones. "No existía ni existe a día de hoy otra alternativa", ha comentado en un repaso desde la moción de censura a Mariano Rajoy hasta las elecciones del 28 de abril y del 26 de mayo. "Los ciudadanos marcaron con su voto esta ruta. [...] Si antes la colaboración funcionó, ahora (con menos escaños de Podemos) también".
En cuanto al reproche insistente de Podemos por pedir la abstención a PP y Ciudadanos, Sánchez ha apuntado a que se trata de un gesto "técnico" para apelar a la responsabilidad de las derechas para permitir formar Gobierno pero que es difícil porque les interesa el independentismo y la confrontación (por eso votan a la par).