Opinión
Cautela necesaria en los bancos
- Las entidades aún pueden perder sus provisiones frente a impagos, pero sin perder de vista los niveles de seguridad
elEconomista.es
Madrid,
Los bancos españoles aligeran en el primer semestre las provisiones con las que se blindan frente a posibles impagos crediticios. El BCE da margen para reducir este tipo de colchones, y entidades como CaixaBank y Sabadell sacan partido de él con especial intensidad, dado que aplican menguas de hasta el 30%. Además, el contexto económico que presenta España los avala a la hora de tomar este tipo de decisiones. El negocio crediticio evoluciona al compás que marca el fuerte crecimiento del PIB, con incrementos capaces de compensar sobradamente las rebajas de tipos que Fráncfort sigue aplicando, y que abaratan los préstamos. A diferencia de lo que ocurría en 2008, nada hace sospechar una burbuja detrás de este auge, dado que incluso en el mercado hipotecario, en apariencia cercano al sobrecalentamiento, existe una demanda capaz de impulsar las operaciones.
Pero son sobre todo los mínimos niveles de morosidad que la banca puede exhibir –en el caso de Santander, cerca de bajar del 2%– los que respaldan la confianza que las entidades muestran a la hora de gestionar las provisiones frente a impagos. Ahora bien, resultaría temerario pensar que esta rúbrica puede descender indefinidamente. Muy al contrario, factores aparentemente alejados de los mercados crediticios domésticos pueden provocar en ellos deterioros muy rápidos e inesperados. Así lo advierte el BCE en relación a la evolución futura de la guerra arancelaria. En el caso de España, conviene también estar prevenidos frente a posibles traspiés del crecimiento, provocados por una situación geopolítica imposible de controlar. Los cortafuegos de los bancos están ahora preparados para asumir esas contingencias y así deben continuar.