Opinión
Un país empobrecido
- El 20% de los trabajadores españoles no pueden pagarse unas vacaciones
- Tener un contrato fijo no garantiza permanencia en el trabajo ni poder llegar a fin de mes
- Los contratos temporales registrados en junio de 2025 han sido 909.020, representando el 60,74% del total
José María Triper
Madrid,
Satisfecho por haber superado su, por ahora, último match ball del Congreso con el apoyo interesado de sus socios enemigos de España que están preparando la nueva lista de humillaciones y chantajes, Pedro Sánchez prepara ya las maletas para marchar de vacaciones a la residencia oficial de La Mareta, a pesar de la plaga de corrupción que infecta a su gobierno y su partido. Vacaciones que, a diferencia del presidente, son cada vez menos los españoles que pueden disfrutar, gracias a esa política económica y social de progreso de la que presume la sociedad Sánchez-Yoli producciones de ficción, y de la que, sin temor a equivocarnos, podríamos decir aquello de que cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.
Así, los resultados de la reciente encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre turismo de residentes muestran que durante el primer trimestre de este año los españoles realizaron un total de 34,7 millones de viajes que suponen un descenso del 14,3% respecto al mismo periodo del año anterior. Caída que se traduce en un gasto de 11.175 millones de euros, un 4,3% menos. Deterioro que coincide con los datos de un reciente informe del Instituto Europeo de Sindicatos en el que se concluye que el 20% de los trabajadores españoles no pueden pagar unas vacaciones este año. También las reservas de viajeros nacionales en España caen un 7% este verano, y las que se mantienen lo hacen con estancias más cortas, afectadas directamente por la subida de los precios, además de por la inflación, unos impuestos disparados y abusivos y la pérdida de poder adquisitivo de los salarios en un mercado laboral contaminado por la temporalidad y la precariedad donde tener un contrato fijo no garantiza permanencia en el trabajo ni llegar a fin de mes.
De hecho, si analizamos los últimos datos del paro registrado vemos que en junio se han realizado más contratos indefinidos que personas los han suscrito y son 30.795 los trabajadores que han sido objeto de más de un contrato indefinido. Son contratos que están implementado el pluriempleo y tienen que ver con el incremento de la contratación a tiempo parcial, o bien, con rescisiones de contratos y realización de una nueva contratación. Como explican desde el Servicio de Estudios de USO "la rotación en el empleo ha llegado a la contratación indefinida que está dejando de ser sinónimo de tener y mantener un empleo estable".
En concreto, los contratos indefinidos de fijos discontinuos suponen el 40% de todos los indefinidos realizados y crecen un 7,86% en términos anuales frente a sólo el 0,8% que lo hacen los indefinidos a tiempo completo. Además de que los contratos temporales registrados en junio de 2025 han sido 909.020, representando el 60,74% del total. Son 96.942 (11,94%) contratos más que el mismo mes del año anterior. Y en el acumulado, de los seis primeros meses se registraron 4.298.573 contratos temporales, con un aumento de 103.201 (2,46%) sobre el mismo periodo del 2024. Añadir a esto que seguimos siendo los líderes del desempleo de la Unión Europea con un total de 3,9 millones de personas que no están trabajando, más de un millón de las que oficialmente se reconocen. Que el salario más frecuente en este país se sitúa en 14.586 euros brutos anuales con un descenso de 3.917 euros en el último año. Caída que añadida a la subida del 14% en la cesta de la compra hace que nuestro poder adquisitivo sea hoy un 4,7% inferior a la media de la UE y la capacidad de compra de los hogares españoles se un 5,6% inferior a la de 2008.
Además, tenemos 12,7 millones de personas, uno de cada cuatro españoles, en riesgo de pobreza y exclusión, con una tasa de pobreza infantil del 33%, la más alta de la UE, y que la nómina del Ingreso Mínimo Vital llega ya a casi 700.000 hogares en los que viven más de dos millones de personas, y creciendo. Pues a la vista de estos datos, señor presidente, siga usted presumiendo de los resultados de unas políticas económicas y sociales dictadas por el fanatismo ideológico, y en contra de la lógica, la razón y los intereses generales y que pase felices vacaciones. Usted que puede porque se las pagamos todos.