La incertidumbre de nuevo manda en bolsa

Las bolsas europeas tuvieron un inicio de semana aciago, con la ruptura generalizada de soportes. Lo evidencia el Ibex tras su descenso del 3,43%. La crisis dio en septiembre un preocupante giro.

Los síntomas de que la recuperación se truncó en pleno verano son evidentes y todo apunta a que lo confirmarán los indicadores adelantados de actividad de la eurozona que mañana se conocerán. A ello se añade el temor a más confinamientos en el Viejo Continente y los obstáculos que el desarrollo de la vacuna se encuentra. Ante tantas incertidumbres, el inversor debe asumir que son previsibles nuevas caídas bursátiles. El Ibex aún puede descender otro 4% hasta el soporte de los 6.420 y éste tampoco ofrece garantías. Es aún posible retroceder a los mínimos de la pandemia.