Dividendo mayor de un banco más rentable

Las ventajas de la fusión entre Caixabank y Bankia empezaron a hacerse evidentes en la primera rueda de prensa conjunta de ambas entidades.

 El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, dejó clara su intención de repartir un dividendo superior al 30% en 2021 con cargo a los resultados de 2020. Antes de su unión con Bankia, Caixabank tuvo que imponerse una limitación del 30% en la remuneración a sus accionistas para ajustarse a las exigencias del BCE, pero, sobre todo, para capear las dificultades de la actual crisis. El escenario ahora, sin embargo, es completamente diferente. La fusión es la respuesta más adecuada a los bajos niveles de rentabilidad que sufre la banca europea. Surge así un banco más sólido, competitivo y con mayor músculo para sostener su dividendo.