El mayor desafío para los bancos
elEconomista.es
Varias voces se han sumado en los últimos días alertando del modo en que la emergencia por el coronavirus ha ahondado el ya crónico problema de rentabilidad de la banca. Se trata de una situación generalizada en la zona del euro, en la medida en que es el fruto de la conjunción de la epidemia y de la persistencia de los tipos de interés del BCE en valores mínimos, un nivel que no han abandonado desde la anterior crisis.
Resulta indudable que en España el problema es especialmente agudo. El vicepresidente del eurobanco, Luis de Guindos, recordó la semana pasada que el coste de capital de las entidades se sitúa en el 10%. El banco que mayor retorno obtiene en España es Bankinter; hasta el punto de que logrará batir el 5% este año. En el otro extremo del espectro, existen ya hasta cuatro entidades en las que la rentabilidad ya es incluso inferior a los tres puntos porcentuales. No es un problema para el que se pueda hallar solución en el corto plazo. Hasta el punto de que los analistas estiman que la banca europea será la mitad de rentable que el promedio europeo todavía en el ejercicio 2021. Ante esta difícil realidad, sólo se abren dos opciones. Continuar reduciendo costes es la primera y hay firmas que harán un gran esfuerzo en ese sentido. Basta con considerar los 4.600 millones adicionales de ahorro que los expertos atribuyen a Banco Santander en los próximos dos años, una marca líder entre los estándares europeos.
Los bajos niveles de rentabilidad continuarán siendo un problema para las entidades españolas también en 2021
Pero otros bancos no disponen de ese músculo y tendrán que recurrir a operaciones corporativas, en la línea de la fusión que Bankia y Caixabank ya tienen en estudio. La rentabilidad es un desafío de primer orden que en muchos casos requerirá ganar tamaño y generar sinergias.