Motor
Adiós a rayar el coche en garajes y calles estrechas: el consejo de un experto para girar sin rozar las paredes
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elEconomista.es
Cualquier conductor sueña con una carretera abierta, con varios carriles anchos y pocos coches en la vía. En ese contexto, circular es sencillo, pero la dificultad aumenta cuando toca maniobrar en lugares con poco espacio. Ya sea una calle estrecha o un garaje con demasiadas columnas a los laterales, tomar curvas muy cerradas puede resultar complicado. Y basta un pequeño descuido para acabar rayando el coche tras rozar con la pared.
Por supuesto, evitar sustos depende en gran medida de la habilidad y la concentración del conductor, que debe conocer las medidas de su coche para poder calcular el giro. Aún así, hay algunos consejos generales que resultan especialmente útiles para las personas que cuando se enfrentan a una curva cerrada circulan con miedo.
La clave para evitar arañazos
Desde la cuenta de TikTok de @carros360.pe, portal experto en automovilismo, apuntan dos trucos para girar sin problemas en calles y garajes estrechos. Tal y como explican, la clave está en "dónde empiezas a girar, y no cuánto espacio hay", por lo que el truco reside en saber cuándo comenzar la maniobra.
En el caso de circular por un metro de separación con respecto a la pared lateral, el giro se debe empezar cuándo el espejo lateral esté a la altura de la esquina. Si la distancia se reduce a medio metro, entonces el momento de empezar a girar es cuando la esquina esté en paralelo con la mitad de tu ventana.
En casos extremos en los que el coche circula a 30 centímetros de la pared lateral, es decir, muy pegado al límite, "cuando el marco de la puerta cruce la esquina, gira y no rayarás nada". Con estos tres consejos que se pueden aplicar a tres situaciones diferentes, no hay motivos para dudar a la hora de tomar una curva cerrada.