Motor
La batalla de los coches eléctricos se prepara para su primera megafusión: Honda y Nissan negocian unirse
- El proyecto incluiría crear una matriz conjunta
- Dejarían la puerta abierta a que Mitsubishi se una más adelante
- Las firmas quieren unificar sus inversiones en coches eléctricos
elEconomista.es
El salto a los coches eléctricos está haciendo temblar los cimientos de la industria automotriz, y Japón, una de sus principales cunas, está sintiéndolo de lleno. Según ha adelantado el medio japonés Nikkei, Honda y Nissan, el segundo y el tercer fabricante en el mercado japonés y el octavo y el noveno del mundo, han iniciado conversaciones para fusionarse, con la intención de firmar un memorándum de entendimiento en los próximos días, como ya habían indicado a principios de año.
El objetivo de la fusión sería poder competir en el mercado de coches eléctricos, el futuro cada vez más próximo del sector, y en el que las firmas de China, junto a la estadounidense Tesla, tienen una ventaja cada vez mayor frente a sus competidoras tradicionales. Según las informaciones de Nikkei, el plan sería crear una matriz conjunta, como ocurrió con Iberia y British Airways, que mantenga ambas marcas por separado pero que permita unificar procesos y diseños.
Según informa la cadena CNBC, el acuerdo dejaría la puerta abierta a que se sumara más adelante Mitsubishi, firma de la que Nissan posee un 24% de sus acciones y que participa en la alianza de Nissan con la francesa Renault. Por el momento, no se sabe si la fusión supondría ampliar dicha alianza con la entrada de Honda, o si llevaría a su ruptura, tras varios años de zozobra tras la fuga de Japón del que fuera su principal arquitecto, Carlos Ghosn.
Las dos firmas produjeron 7,5 millones de vehículos en 2023, por lo que la fusión les colocaría en la tercera posición del podio mundial, solo por detrás de Toyota y Volkswagen, y justo por delante de Hyundai. La clave está en que su objetivo es avanzar en el sector de vehículos eléctricos, que apenas supusieron un 2,3% de las ventas de Nissan en EEUU en 2023. Las cifras de Honda son algo mejores, pero ambas están por detrás de, por ejemplo, las ventas de la china BYD. Mitsubishi, por su parte, apenas fabricó 245.000 coches en 2023
El sector automovilístico está viviendo una etapa de crisis mundial por el inminente salto a los nuevos tipos de vehículos. Los gigantes históricos de combustión siguen vendiendo a buen ritmo, pero las próximas prohibiciones de motores de gasolina y la crisis del cambio climático hacen inminente un cambio de modelo. Y China ha llegado primera a este nuevo mercado, sin la losa de tener que reconvertir o cerrar unas fábricas de combustión que no existen en el gigante asiático: en 2023 concentró el 70% de todas las ventas de coches eléctricos, produciendo 9,5 millones de unidades, y ese año, sus exportaciones aumentaron un 70% respecto a 2022, alcanzando los 34.100 millones de dólares.
En Europa, Volkswagen es la principal perdedora: la firma germana tiene previsto clausurar factorías en su Alemania natal por primera vez en 87 años de historia, lo que ha desatado todas las alarmas. Por ese motivo, la UE se enfrenta a un conflicto económico sin precedentes con China: imponer aranceles a todos los coches eléctricos procedentes de dicho país, exponiéndose a sanciones y provocando más inflación; o dejar que una de las principales industrias europeas se hunda ante un rival más fuerte.