Motor

Cómo colocar correctamente la matrícula del coche si se me ha caído o torcido

iStock

elEconomista.es

Existen determinados elementos de un vehículo con los que la Dirección General de Tráfico (DGT) es relativamente laxa en caso de que se circulen con ellos deteriorados. Sin embargo, hay otros que, dada su relevancia, deben estar siempre el perfectas condiciones. Uno de ellos es la matrícula.

La matrícula no incide directamente sobre la seguridad de un vehículo en caso de accidente, pero sí sirve para que los organismos de seguridad puedan identificar a cada uno de los conductores. No ya solo en caso de que se produzca una infracción o percance al volante, sino que también para otros delitos no asociados a la conducción (pensemos en un crimen, por ejemplo).

Por esta razón, el hecho de no llevar la matrícula puesta o llevarla de forma no visible supone una infracción grave, que se sanciona con 200 euros. La multa puede ascender hasta los 6.000 euros si se manipula la matrícula de forma deliberada.

Caídas, pérdidas o robos

No obstante, puede pasar con relativa facilidad que la matrícula se caiga. Ya sea al aparcar, al rozar un objeto o, simplemente, por el deterioro del tiempo. En este caso, ¿qué se puede hacer?

La primera medida debería ser comprobar si disponemos de los tornillos adecuados para fijar la matrícula. Si se disponen de ellos, conviene desatornillar la placa, retirarla y limpiar la superficie del portamatrículas. Después, tocará fijarla. Para ello, también existen otras opciones, como remaches o cintas adhesivas.

Si no disponemos de estos elementos, deberemos llevar el vehículo a un taller para que sean los profesionales de la mecánica quienes lo fijen. Y si la matrícula se ha extraviado, deberemos acudir a la policía e interponer una denuncia.