Bolsa, mercados y cotizaciones
El euro acaba destrozando la ya de por sí mala rentabilidad del trimestre
- La 'divisa común' se aprecia contra el dólar un 4,8% desde enero
Isabel M. Gaspar, José Luis de Haro
Si algo ha dejado el trimestre que acaba de finalizar para el inversor han sido unas cifras para olvidar. Basta con echar un vistazo a la renta variable europea, que dejó unas pérdidas medias del 7,6% durante los tres primeros meses del año. No obstante, y contra todo pronóstico, por los rendimientos que venían acumulando y las preferencias de los expertos a comienzos de año, la renta fija actuó como el activo estrella con el que salvar el tipo. "Los mercados han estado recientemente tan plagados de rotación y volatilidad que lo que un día es una cartera de inversiones perfecta se convierte en una pesadilla al siguiente y, por lo tanto, es crucial mantener la convicción", explican desde UBS.
A este respecto, los fondos de deuda corporativa y gubernamental de Europa cosecharon ganancias trimestrales de hasta el 2,7%, siendo las únicas categorías, además de los fondos de deuda global, que dieron una alegría al inversor. Para ello, ha sido esencial el toque mágico de Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, que amplió el programa de compras de deuda de la institución destinando más dinero para comprar bonos cada mes y, principalmente, incluyendo en su hoja de ruta la adquisición de deuda de empresas con grado de inversión.
Ahora bien, el inversor que hubiese visto en la renta fija su salvavidas no sólo ha contado con el banquero italiano como aliado, sino que también ha tenido que hacer frente a un enemigo: el euro.
La divisa común escaló en el trimestre frente al dólar un 4,8%, siendo su mejor balance desde el año 2011. Una subida que terminó por comerse las rentabilidades positivas que se habían cosechado en EEUU. Así, tanto los bonos gubernamentales como los corporativos no pudieron evitar las pérdidas.
Del mismo modo, y a pesar de las alzas que registra Wall Street, los fondos de renta variable estadounidense agravaron su balance trimestral por el efecto divisa, llegando a acumular en algunos casos un descenso cercano al 7%.
Dubravko Lakos-Bujas, estratega jefe de JP Morgan en Nueva York, justifica que el mensaje lanzado por la Reserva Federal el 16 de marzo, aderezado con las palabras de su presidenta, Janet Yellen, el pasado martes "empujaron a la baja el dólar y proporcionaron un alivio implícito a los activos y materias primas denominados en esta divisa, especialmente en los mercados emergentes". "En nuestra opinión esto es positivo para las acciones que buscan valor, pero negativo para aquellos títulos que aprovechan el momento".
No obstante, sin tener en cuenta el lastre del euro, la renta fija estadounidense culminó un trimestre bastante bueno. El bono del Tesoro americano registró su mejor marca trimestral desde junio de 2012. La deuda pública estadounidense experimentó su último rally tras las declaraciones de Yellen en el Club Económico de Nueva York, que provocaron que el mercado no descuente una subida de 25 puntos básico por lo menos hasta el próximo noviembre. Aunque este aliciente ya se ha evaporado, la rentabilidad del bono a 10 años tocó este jueves el 1,82%, cuando comenzó el año por encima del 2%.
Pérdidas del 7%
En el caso de España, y con un Mercado Continuo que se dejó un 8,8% durante los tres primeros meses del año, no fue de extrañar que los fondos que replican este mercado arrastraran números rojos cercanos al 7%.
Eso sí, hasta en el desastre hay diferencias. Dentro de los veinte mayores productos, el Santander Small Caps España A FI, gestionado por Lola Solana, fue el que registró un mejor comportamiento con un retroceso del 4,17%, seguido del Aviva Espabolsa B FI, con un 4,23% y que dirige Rodrigo Utrera, y del producto que lidera Ricardo Cañete, el Bestinver Bolsa FI, con un 4,5%. Por su parte, el BBVA Bolsa FI y el Foncaixa Bolsa Gestión España Estánd FI fueron los alumnos más retrasados, con pérdidas superiores al 11%.
Caída en los beneficios de Estados Unidos
Con la mirada puesta en la presentación de resultados del primer trimestre, Jeffre Saut, estratega jefe de Raymond James, indica que "el consenso espera que las compañías del S&P 500 registren una caída de entre el 7 y el 8% con respecto al año pasado". "Es importante tener en cuenta que sólo 3 de los 10 sectores del indicador tiene previsto registrar un incremento, entre ellos las telecomunicaciones".