Bolsa, mercados y cotizaciones
Qué alternativas escuchar cuando el mercado es un 'disco rayado'
Arantxa Rubio, José Luis de Haro, Maite López
La bolsa se ha convertido en un activo en el que se puede incurrir en mayores pérdidas... Conozca la cara 'b' del disco de la inversión en el que aún quedan melodías que escuchar
Cuando se para la música, siempre hay alguien que no lo asume y quiere seguir bailando, aunque no le acompañe el resto. Algo así está sucediendo ahora en mercado. Para muchos, la música ha dejado de sonar, por eso los grandes gestores de fondos han hecho acopio de liquidez hasta niveles no vistos desde la quiebra de Lehman Brothers, y Ecotrader ha recomendado hacer caja y bajar la exposición a bolsa al 19 por ciento. Pero, aún así, algunos inversores siguen buscando qué hacer con su dinero incluso cuando ya se han encendido las luces, en lugar de irse a casa hasta la próxima fiesta. La parte positiva es que todavía hay otras músicas alternativas aptas para el inversor inconformista. Pero no todas valen para el mismo tipo de perfil.
Hay opciones para oídos más afines al chill out, como los fondos monetarios, que sirven para descansar el dinero de forma transitoria, eso sí, sin esperar grandes alegrías, porque las rentabilidades son más bien bajas y las comisiones, a veces, más elevadas de lo que deberían en relación a lo que renta el producto.
Otra alternativa con más ritmo es invertir en índices de bolsa pero evitando los valores más volátiles o replicar al índice suponiendo que todos sus miembros ponderen por igual (por ejemplo, evitar la dependencia que tendría el Ibex de Inditex, Santander o Telefónica). Se trata de los ETF (fondos cotizados, es decir, que funcionan como una acción) conocidos como equal weight y low volatility. Por último, para quien quiera escuchar los ecos que ha dejado la última reunión de la Reserva Federal, está la opción del country: invertir a favor del dólar. El jueves el euro llegó a escalar hasta 1,14 dólares, pero el consenso lo sitúa en 1,07. Todo ese recorrido se puede aprovechar con los productos adecuados.
La parsimonia de la Fed para subir tipos abre un escenario en el que el dólar es un seguro a medio plazo
El dólar se presenta como una opción de inversión, más aún después de que la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, y los miembros del Comité de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) del banco central estadounidense reconocieran el pasado jueves que los acontecimientos que acechan a la economía mundial podrían dejarse notar en la actividad económica de Estados Unidos. Una declaración que algunos expertos interpretan como el primer paso de la Fed para sumarse a "una devaluación competitiva a nivel global".
"Una subida de tipos habría fomentado la salida de capitales en China y forzaría al Banco Popular del país a vender más deuda estadounidense, una operación que ya ha creado inestabilidad en los mercados financieros desde la primera devaluación del yuan el pasado 11 de agosto", explica David Woo, estretega de divisas de Bank of America Merrill Lynch.
Desde el banco estadounidense rebajaban sus previsiones sobre el euro/dólar inmediatamente después de la reunión. Así, la paridad entre ambas divisas no se producirá a finales de este año como estaba inicialmente previsto sino que la moneda europea cerrará 2015 en niveles de 1,05 dólares. "Nuestra proyección sigue indicando una subida de tipos en diciembre por parte de la Fed y una ampliación del QE por parte del Banco Central Europeo más allá de septiembre de 2016", aclaró Woo. El consenso de mercado que recoge Bloomberg sitúa el cruce en 1,07 dólares para finales de año.
Aún así, si la Reserva Federal optase por no subir tipos en 2015 y el BCE no ampliase sus estímulos, el euro/dólar podría apreciarse por encima de los 1,15 dólares, un nivel que "no será sostenible" para los expertos de BofAML. Para Deutsche AWM, la decisión de la Fed generará cierta debilidad del dólar a medio plazo, provocando altibajos de cara a alcanzar la paridad entre el euro y el dólar, algo que se materializará en los próximos 12 meses. "La incertidumbre sobre las intenciones de la Fed generará volatilidad en los mercados de divisas, con el billete verde enfrentando dificultades a corto plazo frente sus pares en grandes países desarrollados", advertían desde Deutsche AWM.
Los expertos de Principal Global Investors coinciden con las estimaciones de una paridad entre el euro y el dólar en el próximo año y el billete verde cambiándose en los 125 yenes. Su capitán, Jim McCaughan, explicó a Bloomberg que será preciso "un shock mundial mucho mayor para no ver una subida de tipos en EEUU". Es por ello que "el dólar no mantendrá una tendencia bajista durante mucho tiempo pese a la renovada agenda acomodaticia de la Fed", señaló.
Para aprovecharse de esta opción existen ETF (fondos cotizados) que replican el comportamiento de índices. El PowerShares DB US Dollar Index Bullish Fund replica el índice Deutsche Bank Long US Dollar Futures y sube un 2,96 por ciento en el año. Por su parte, el WisdomTree Bloomberg USD Bullish replica al Dollar Total Return Index y avanza un 4,7 por ciento en el mismo lapso.
Comprar bajas volatilidades o fondos equiponderados, para quienes se mueven tranquilos a ritmo de jazz
Durante las últimas semanas se ha visto un aumento de las oscilaciones capaz de quemar a más de un inversor. Jornadas como las del pasado 24 de agosto son un claro ejemplo de ello. Buscar otras opciones con las que protegerse de ello quizá no esté de más. En este sentido, los ETF de baja volatilidad son una excelente opción para ganar exposición a uno o varios mercados sin asumir riesgos.
Aunque su historia es más o menos reciente (el primer producto de estas características, el PowerShares S&P 500 Low Volatility Portfolio, se lanzó en 2012), cada vez se habla más de esta estrategia: el low volatility, o la selección de títulos que tienen una volatilidad menor que la media del mercado en el que cotizan. Estos fondos ofrecen la posibilidad de replicar el comportamiento de un índice que es menos volátil y que, además, a veces logra mejores resultados.
Veamos un ejemplo. El SPDR Euro Stoxx Low Volatility, que comercializa la gestora americana State Street Global Advisors, tiene como subyacente el índice Euro Stoxx Low Risk Weighted 100. En lo que va de año sube un 10,81 por ciento, según los datos de Morningstar. Tres veces más de lo que renta el Euro Stoxx 50 en el mismo periodo, que es un 3,48 por ciento, según Bloomberg. Invierte en valores como MAN, Hannover Re, Sampo, Sodexo o la española Iberdrola.
No es el único caso, el iShares MSCI Europe Minimum Volatility, que toma como referencia el comportamiento del índice MSCI Europe Minimum Volatility, se apunta un alza del 9,9 por ciento desde el 1 de enero, el doble que el MSCI Europe, que solo avanza un 4,68 por ciento en el mismo periodo. Sus mayores posiciones son Fresenius, Swiss Re, Sampo, RB o Nestlé.
Si quiere ganar exposición a EEUU también hay un puñado de productos. Entre lo que invierten en el S&P 500, el que mejor lo hace en el año, según los datos que ofrece Morningstar, es el iShares S&P 500 Minimum Volatility. Tiene como subyacente el selectivo S&P 500 Minimum Volatility y su rentabilidad en dólares en 2015 es del 0,63 por ciento, por encima del 3 por ciento que retrocede el S&P 500 en el mismo periodo. Confía en valores como Chubb, Starbucks, Lilly o Accenture. Pero si no quiere centrarse en un mercado concreto, el iShares MSCI World Minimum Volatility pesca en un universo de valores emergentes y desarrollados con volatilidades inferiores a sus mercados para tratar de replicar a su índice de referencia (MSCI World Minimum Volatility). Sube un 0,92 por ciento en el año frente a la caída del 3,27 por ciento del MSCI World.
Otra opción son los ETF equal weight, que tienen como referencia un índice en el que todos los valores tienen el mismo peso. Así, consiguen despegarse del mercado. El PowerShares Russell 1000 Equal Weight, que replica al índice Russell 1000 Equal Weight, cae un 2,4 por ciento en 2015 frente al 2,5 por ciento del Russell 1000. Y el Guggenheim S&P 500 Equal Weight, que replica al S&P 500 Equal Weight Index Total Return, cae un 2,7 por ciento frente al 3 por ciento del S&P 500.
Una opción 'chill out' son los fondos monetarios para relajarse y que no le crispe el ruido del mercado
Ante la alta volatilidad que acecha actualmente a los mercados existen otras opciones que, aunque no le blindan totalmente contra las caídas, son mejores que guardar su dinero debajo del colchón. Bien sea porque es un inversor conservador y necesita relajarse del ruido del mercado, bien porque tiene su dinero en renta variable y necesita aparcarlo durante un periodo de tiempo determinado, puede fijarse en los fondos monetarios. Con ellos no obtendrá grandes rendimientos, pero tampoco tendrá grandes pérdidas.
Eso sí, antes de elegir uno, debe tener claro que estos fondos que invierten en renta fija a muy corto plazo también lo tienen complicado. De hecho, los expertos señalan que llevan cuatro años con rendimientos cercanos al cero por ciento e incluso negativos. Para evitar sustos inesperados, otra cuestión a la que debe prestar atención es a la comisión del producto ya que, si a una pequeñísima rentabilidad le impone una elevada comisión, el resultado podría ser de importantes pérdidas. Un coste por debajo del 0,5 por ciento para un objetivo de rentabilidad de, como mucho, el 1 por ciento para el año, resulta excesivo. Y un 20 por ciento de los productos de esta categoría tienen una comisión superior al 0,5 por ciento (algunos de ellos alcanzan, incluso, el 3 por ciento anual, según la información que ofrece Morningstar, y encima tienen pérdidas en lo que va de ejercicio).
A simple vista se observa que las rentabilidades no superan el medio punto porcentual en ningún caso lo que, en un entorno como el actual con los tipos de interés en mínimos históricos, es normal.
El producto que mejor lo ha hecho en lo que va de año, de entre los que Morningstar engloba en la categoría de monetarios euro, es el Renta 4 Monetario, que logra un 0,44 por ciento. Aun así, su coste de gestión anual es del 0,4 por ciento. Un patrón que se repite en el resto de productos que se pueden comprar en España. El siguiente mejor con comisiones razonables es el CS Corto Plazo, que comercializa la gestora Credit Suisse Gestión. Sube un 0,34 por ciento y cobra un 0,5 por ciento al año en concepto de mantenimiento. Con este nivel de costes tiene otras dos alternativas: Amundi Cash Corporate IC, que avanza un 0,17 por ciento; y Bankoa-Ahorro Fondo (de Crédit Agricole), que repunta un 0,15 por ciento en el mismo lapso.
Bastante inferior es el importe que exige el siguiente producto en concepto de gestión: Bankinter Dinero 4. Tan solo es del 0,15 por ciento al año, según los datos de Morningstar, y su rentabilidad en 2015 es del 0,28 por ciento. En torno a este mismo nivel existen otros dos productos: Deutsche Invest I Liquidity Fund USD LCH, que tiene una comisión del 0,20 por ciento y cuya rentabilidad en euros es del 0,26 por ciento a pesar de que en dólares ganaría un 7 por ciento; y Openbank Corto Plazo, que gestiona Santander Asset Management. Este último es el que menos exige, un 0,10 por ciento anual, mientras que avanza un 0,24 por ciento en lo que va de 2015.
'Long/short', una alternativa más 'heavy': que su gestor decida en qué valores hay que subir o bajar el volumen
Con la Reserva Federal americana sin despejar la principal incógnita de la ecuación -cuándo subirá los tipos por primera vez desde la crisis-, China de fondo y el panorama electoral particular de España, este año va a ser recordado posiblemente como el más volátil de los últimos ejercicios. Ante esa pérdida del norte en la brújula de los inversores, existe una alternativa de inversión -no apta para todo tipo, sino más bien para alguien con tolerancia al riesgo-, que son los fondos long/short de bolsa.
Con este tipo de productos el inversor deja en manos del gestor que tome la decisión sobre en qué valores es momento de invertir al alza y en cuáles hay oportunidad de posicionarse a la baja. Una estrategia agresiva que, aunque parezca pensada solo para momentos de elevada volatilidad como el actual, también se defienden en el largo plazo.
Los fondos long/short a los que un inversor español tiene acceso acumulan una rentabilidad en el año (hasta el pasado miércoles, sin tener en cuenta la caída del mercado tras la Fed) de casi el 5 por ciento. En ese mismo periodo, la principal referencia europea, el EuroStoxx, sube poco más de un 3 por ciento. De hecho, de los productos que se comercializan en España en esta categoría, solo dos sufren pérdidas en 2015.
Además, en la última caída del mercado iniciada en agosto, la estrategia alcista y bajista también ha servido de refugio: este tipo de fondos sufre en este último bache bajista un leve descenso del 0,4 por ciento de media, es decir, limitan y mucho la pérdida que ha sufrido el mercado europeo en el mismo periodo, de más del 8 por ciento (con datos hasta el 15 de septiembre).
Uno de los más rentables no es puramente de bolsa, sino que también tira de renta fija, una combinación que le permite ganar un 8 por ciento este año (es una cifra que bate con creces a cualquier índice europeo), se trata del GAM Star (Lux) - European Alpha. Pero también se puede ganar un 8 por ciento solo con renta variable, es el caso del Jupiter JGF Europa L EUR B Acc -aunque recurre, como es común en este tipo de fondos a derivados además de acciones-. Se posiciona bajista en el EuroStoxx 50 y también en algunos valores españoles como Indra, OHL, Iberdrola y Telefónica. Su gestor, sin embargo, confía en las posibilidades alcistas de Adidas o la aseguradora Prudential. La inversión mínima es de 1.000 euros y gestiona a cambio de pagar una comisión del 1,5 por ciento, que es la media que suele cobrar este tipo de fondos.
Otro de los productos que defienden rentabilidades atractivas y no cobran una comisión excesiva es el BSF European Absolute Return D4 EUR, que además, forma parte de la elección de los mejores 45 fondos de inversión por parte de Morningstar para elEconomista (Ecofondo). Gana casi un 6 por ciento en 2015 y es de los más baratos, al cobrar un 1 por ciento de comisión. Tiene posiciones cortas en Mapfre, Abertis, Dia y Popular, y en el sector asegurador, mientras que es alcista en Prudential y Aviva, se posiciona corto en Generalli y Allianz.