Bolsa, mercados y cotizaciones
La misteriosa crisis de Noruega con su moneda abre el debate sobre 'vincularse' al euro para someter la inflación
- La corona cae con fuerza con el 'precio del dinero' en máximos
- Norges Bank teme que provoque incluso una nueva subida de tipos
- El petróleo, la clave del misterio sobre la divisa
Álvaro Moreno
Noruega es uno de los países más ricos de toda Europa. El gran suministrador de gas de Europa. Sin embargo, lleva años atrapada en un serio problema: su moneda, la corona, no para depreciarse profundamente frente al euro. Concretamente, ha perdido desde enero de 2022 cerca de un 15% de su valor frente a la divisa comunitaria. La subida de tipos del BCE ha sido veneno para este intercambio, es por ello que el gobierno y autoridades de Oslo esperaban con paciencia la hora de los recortes en Fráncfort para poder paliar este problema y evitar que la inflación acose los planes de su banco central. El problema es que la hora decisiva ya ha llegado y... lejos de apreciarse, la corona sigue cayendo.
En lo que va de 2024, la divisa cede cerca de un 4,5%, un 2,7% desde julio. Esto, con el 'precio del dinero' en su punto máximo, el 4,5%, donde el Norges Bank lo dejó en diciembre de 2023. Además, no se adivina que el giro hacia los recortes esté cerca. El propio pronóstico del banco central habla de tres reducciones ya entrado 2025, todas ellas de solo 25 puntos básicos. El tema de la moneda es algo totalmente recurrente en las decisiones del mismo, hablando de que si la tendencia a la baja continua, espoleando la inflación, abren la puerta incluso a subir el precio del dinero.
"Según nuestra evaluación actual de las perspectivas, es probable que el tipo de interés oficial se mantenga en el nivel actual durante algún tiempo", afirmó la gobernadora Ida Wolden Bache, tras decidir mantener los tipos en agosto. Respecto al motivo de su decisión, el propio banco central hablaba de que "la corona se ha depreciado y está más débil de lo previsto". En ese sentido, completó su argumento alegando que "el Comité se preocupó especialmente por la evolución del tipo de cambio de la corona y sus posibles implicaciones para la inflación". Por ello, "si existen perspectivas de que el IPC se mantenga más alto durante más tiempo de lo previsto anteriormente, los tipos de interés podrían ser (incluso) más alto". Este golpe exterior es incluso más problemático para este país, pues la mayoría de sus productos de consumo son importados.
En cualquier caso, el IPC del país nórdico ha bajado de forma ostensible, situándose en el 2,6% en agosto tras estar a comienzos de año en el 4,7%. Esta caída de la misma es clave para que el país pueda abandonar el ciclo de condiciones financieras tan restrictivo y, pese a las buenas noticias, la realidad es que existe un auténtico temor de que la corona frustre este avance. "La inflación ha bajado, pero Norges Bank necesita convencerse de que el 2% se alcanzara de forma consistente" comentan desde Nordea. Sin embargo, "todavía queda mucho camino por recorrer con una corona noruega débil" comenta el analista Dane Cekov.
El debate sobre la divisa domina completamente el discurso en el país del norte, algo que ha generado una gran preocupación. El ex ministro y miembro de la oposición Sveinung Rotevatn, ha explicado en una entrevista a Financial Times que el país necesita resolver de una vez por todas el "misterio" de la caída de la corona hasta mínimos históricos frente al euro y el dólar. En definitiva, para ello debería vincular la misma al euro. "La debilidad de la corona encarece todo, ya que importamos prácticamente todos los bienes de consumo. Esto genera inflación, lo que a su vez genera tipos de interés elevados. El perdedor es el consumidor noruego".
La fórmula de atar la cotización de la moneda nórdica al euro, tal y como ocurre, por ejemplo, con la corona danesa, ya se ha presentado como opción en el debate para solucionar este problema, aunque de momento sus partidarios son minoritarios. Esto otorgaría estabilidad, pero, a cambio, la nación perdería independencia y control sobre su propia política monetaria. Un debate que ya surgió en la vecina Suecia hace un año, cuando la caída de su propia moneda también aumentó los augurios de inflación.
En cualquier caso, el exministro no es el único que aboga por esta solución. Analistas como los del grupo Eika comentan en su último informe que "la vinculación es inevitable" dado que este es un problema recurrente y "se trata de la solución más clara", comenta la firma al diario local Nettavissen.
¿Por qué cae la corona noruega?
Al margen de las implicaciones que tenga este fenómeno, muchos analistas se muestran extrañados sobre el porqué detrás del movimiento que está emprendiendo la corona. La diferencia con respecto a los ciclos de tipos debería estar impulsando la moneda. En ese sentido, la tasa de desempleo sigue muy baja, en el 2% y con la economía repuntando desde finales de 2023, con el PIB creciendo un 1,4% el último trimestre.
Desde ING señalan, además, que el factor fundamental, la balanza comercial "es el factor clave" algo que tampoco explica el bajo precio de su divisa. "Los términos de intercambio en la eurozona y Suecia se han deteriorado en comparación con los niveles previos a la pandemia". En resumen "si excluimos el pico de 2022, la cuenta corriente de Noruega se encuentra en máximos históricos (17% del PIB)".
En ese sentido señalan a una preocupación por el precio del petróleo con el barril en los 72 dólares. No se veían unos precios similares en el barril a los que se están observando este mes de septiembre desde principios de 2021, cuando lo peor de la pandemia aún estaba en la retina de los mercados y las principales economías del mundo, congelando la demanda del combustible.
"Una gran parte de las ventas de petróleo se liquida en dólares estadounidenses y se invierte directamente en el extranjero"
En ese sentido, la moneda de Noruega es altamente sensible al precio del barril por la alta dependencia de su economía ante esta industria. En 2024 el ministerio de Economía de Noruega estima que el 24% de su PIB dependerá de la industria energética, una tendencia que viene de largo con siempre un peso de entre el 10% y el 35% desde el arranque del milenio. En cualquier caso desde Nordea creen que esto no es suficiente "Sí, el precio del petróleo es más bajo, pero ni siquiera se acerca a explicar el cambio de la corona noruega", comenta Ole Hakon en su último informe.
Los expertos de BCA Research achacan a una mezcla de los dos factores anteriores a la situación actual, concretamente por problemas con el Mecanismo del Fondo de Petróleo. "La teoría económica estándar sostiene que un superávit de cuenta corriente normalmente debería conducir a una apreciación de la moneda". El problema, según los expertos, es que no se está liquidando en coronas, sino en dólares "lo que hace que sube el tipo de cambio".
En resumen "una gran parte de las ventas de petróleo se liquida en dólares estadounidenses y se invierte directamente en el extranjero a través del mecanismo del fondo del petróleo. Por supuesto, todavía hay entradas de dinero a Noruega, pero el gobierno también transfiere parte de este capital al exterior, por encima del déficit presupuestario". Pero no es el único factor que está teniendo un importante peso pues además de una balanza por cuenta corriente "menos favorable" los beneficios que las empresas "se reinvierten en el extranjero añaden una presión adicional a la baja sobre la corona ".
Desde ING también señalan a factores internos como la reciente caída de la inflación, que ha generado "dudas en los mercados de que el banco central pueda mantener su postura durante más tiempo". En cualquier caso, creen que la corrección está siendo objetiva y creen que está un 13% por debajo de su valor real, por lo que esperan un giro en el medio plazo hacia una revalorización.