Bolsa, mercados y cotizaciones
Las empresas financian 70.000 millones en los primeros diez años del MARF
- Hay 143 empresas que han emitido deuda de forma directa
- El saldo vivo actualmente se sitúa cerca de los 8.000 millones
Isabel Blanco
Hace diez años, en un pequeño despacho del Palacio de la Bolsa de Madrid, un entonces ya veterano en el mercado oficial de renta fija (AIAF) explicaba a este medio cómo en un tiempo récord de diez meses se había gestado un nuevo mercado de deuda accesible para pequeñas empresas. El nombre elegido fue el de MARF (por las siglas de Mercado Alternativo de Renta Fija) y ese padre de la criatura, Gonzalo Gómez Retuerto, tenía mucha confianza en que, aunque tardase un tiempo en echar a andar, acabaría convirtiéndose en una fuente real de financiación para compañías de menor tamaño que no tenían tanta facilidad de acceso a los mercados de capitales. En su primera década de vida, 143 firmas han acudido al MARF de manera directa y se han canalizado más de 70.000 millones de euros en total.
Su creación no fue pensada para inversores particulares, sino que la necesidad que trataba de cubrir era la de ser el canal que conectase a institucionales con empresas pequeñas y que, además, esas emisiones fuera en muchos casos incluso reclamadas por los propios inversores. "Se puede hacer un traje a la medida perfecto, con la estructura específica que necesite un fondo. Podrá pedir a un asesor unas características, un volumen o un sector determinado. Esto se puede diseñar muy bien en la renta fija. Por eso hay sitio para emisiones de 5 millones, igual que de 500 millones", explicaba entonces en una entrevista Gómez Retuerto, que hoy continúa siendo el director general del MARF pero también el de Renta Fija de BME.
Era octubre de 2013, y en aquel momento él mismo destacaba que en economías cercanas la financiación no bancaria era del 30-40% mientras que en España apenas llegaba al 10-20%. "En el momento de la creación del MARF, justo después de la gran crisis financiera, existía una necesidad imperiosa en la economía española de diversificar las fuentes de financiación de las empresas. Diez años después, pensamos que este mercado de BME ha contribuido de forma decisiva a ello, gracias a su agilidad en los trámites y a su flexibilidad, que permiten a cada compañía elegir la alternativa que mejor conviene a sus necesidades", valora ahora.
Quién emite en el MARF
De las 143 compañías que han realizado emisiones en el MARF (varios cientos más lo han hecho con su participación en fondos de titulización) 14 son internacionales, "destacando una representación relevante de compañías portuguesas", subrayan desde BME. Entre las españolas, hay empresas de sectores tan diversos como el de la alimentación, el financiero, la construcción, energía, inmobiliario, tecnológico o transporte, entre otros. Algunas ya conocían los mercados financieros porque cotizan en bolsa (como Sacyr, Aedas, Metrovacesa, Técnicas reunidas, Pharma Mar, Elector, Tubacex, Vidrala, Fluidra…) pero para otras muchas ha sido su primer acercamiento.
Actualmente existe un saldo vivo cercano a los 8.000 millones de euros distribuidos en muchos formatos de deuda, desde programas de pagarés para la obtención de financiación a corto plazo hasta emisiones de bonos a medio y largo plazo, pasando por project bonds para la financiación de infraestructuras o las titulizaciones. Además, según señalan en BME, "en los últimos años han empezado a emitirse en el mercado valores ESG: bonos sostenibles, ligados a la sostenibilidad, sociales o emisiones verdes". El primer bono verde en este mercado lo lanzó Grenergy en 2019.
Este mercado también ha servido para articular, tras la pandemia por el Coviv-19, líneas de avales del ICO por valor de 4.000 millones de euros. Y desde el año 2020, el MARF está incluido en la lista de mercados elegibles por parte del BCE, lo que implicó que el banco central pudiera adquirir deuda registrada en este mercado de BME en sus programas de estímulos.