Bolsa, mercados y cotizaciones

Cellnex reducirá su deuda neta por primera vez en su historia este año

  • Se estima un apalancamiento de 6,5 veces

Carlos Simón García
Madrid,

El primer y gran objetivo que ahora tiene marcado Cellnex es lograr que S&P le conceda el grado de inversión. Esta meta responde a una clara necesidad de reducir los costes de financiación en un momento en el que los tipos de interés están al alza, pero también a que ya quedaban limitadas oportunidades para seguir creciendo de forma inorgánica en Europa.

Este objetivo está marcado a fuego para conseguirlo antes de que termine 2024. El principal requisito que se plantea desde la agencia de rating es el nivel de endeudamiento de la empresa, que debe situarse por debajo de las 7 veces. Y esto, vendrá por el incremento que se espera para el ebitda en los próximos años gracias, por un lado, al desarrollo del pipeline comprometido, ganar cuota de mercado y los proyectos adyacentes y, por otro, la reducción de la deuda neta a través de pagar parte de los vencimientos con el flujo de caja y las ventas de algunos activos no estratégicos.

Precisamente la semana pasada anunció la venta de 2.353 torres en Francia por 631 millones a PTI y Bouygues, algo que estaba previsto de acuerdo a las condiciones exigidas por Competencia en el país francés tras la compra de Hivory en 2021.

Merced estas circunstancias, los analistas han ido aligerando sus estimaciones de deuda futura, hasta situarla al cierre de este año en 19.619 millones, 200 menos que la del año pasado, siendo el primer descenso interanual en la historia de Cellnex como cotizada. Si esto terminase así, teniendo en cuenta las previsiones de beneficios del consenso, acabaría el año con un endeudamiento de 6,5 veces, por debajo del umbral clave para conseguir el aprobado crediticio. De cara a los próximos años el mercado espera que la deuda neta siga en descenso mientras el ebitda, pese a no contar con nuevo perímetro inorgánico, seguirá al alza, haciendo que la ratio de apalancamiento continúe su reducción, ya por debajo de las 6 veces en 2024. Y es que en dicho ejercicio se prevé que vuelva al free cash flow positivo, lo que le permitirá acelerar el pago de su pasivo. Para dos años después, en 2026, llegará, si no se tuerce la cosa, el primer beneficio neto desde 2017.

"En Cellnex, lo que tenemos que ver ahora es cuál es su planteamiento financiero y ver si la caja generada va a servir para reducir deuda o para mejorar la remuneración al accionista, teniendo en cuenta que en los próximos cuatro años tiene comprometidas muchas inversiones ligadas a los compromisos de expansión", explica José Ramón Ocina, analista de Mirabaud.

Valoraciones en 50 euros

Después de un año horrible en bolsa como fue el pasado, muy penalizado por el inicio de las subidas de tipos de interés, en este se esperaba una recuperación que, aunque acumula algo más de un 12%, todavía tiene margen para seguir borrando las pérdidas mencionadas. Todavía tendría que rebotar más de un 70% para recuperar los máximos históricos que alcanzó sobre los 60 euros en 2021. No obstante, el consenso de analistas que recoge FactSet no apunta tan alto y fija su precio objetivo medio de cara a los próximos 12 meses en el entorno de los 50 euros, lo que todavía le dejaría un recorrido del 42% desde los niveles actuales.

"Dada la complejidad del entorno macro, muchos están advirtiendo del riesgo de invertir en una empresa que tiene un apalancamiento de 7,5 veces; sin embargo, pensamos que el desapalancamiento orgánico, sobre todo después de la fuerte inversión en BTS [build to suit] del año pasado, unido a las ventas que está obligada a hacer en Francia, les permitirá lograr ese grado de inversión el próximo año", explican desde UBS. "Esto coincidirá con un mejor entorno de tipos, que empezarán a normalizarse", agregan.

Además, hay que tener en cuenta que tres cuartas partes de la deuda neta que sostiene está a tipo fijo, por lo que el riesgo que ha suscitado la subida de tipos realmente está limitado. "Por eso la compañía cree que no tendrá que volver a refinanciar nada hasta 2027, más allá de los créditos revolving que sí que tendrán costes algo más elevados y podrían elevar el coste de financiación hasta el 2,7% aproximadamente desde el 1,8% actual", explican en UBS.

Este curso no tiene vencimientos en el calendario, pero sí inversiones que realizar. Según las estimaciones de UBS éstas se quedarán ligeramente por encima de los 2.700 millones de euros mientras que la generación de caja prevista se sitúa en 1.610 millones, lo que unido a la liquidez disponible permite no tener que acudir al mercado de financiación con necesidades más allá de alargar vencimientos o rebajar tires, como hizo con la emisión del convertible de 1.000 millones a finales de julio por 2,125%, que permitió recomprar otros bonos por 787,6 millones que vencían en el año 2026.