Bolsa, mercados y cotizaciones
La Historia augura otra caída del 24% en el S&P 500 para final de año
Javier Collado Sánchez
El pánico parece no tener fin. Tras la corrección en las bolsas de los primeros meses del año, el retroceso ante las sucesivas subidas de los tipos de interés y la caída del consumo que podrían conducir a una recesión, el miedo sigue en el cuerpo de los inversores a pesar del resurgimiento de esta última semana. Pero los datos históricos no apoyan por el momento una perspectiva optimista en uno de los grandes índices mundiales, el S&P 500.
El selectivo que agrupa a las 500 mayores empresas estadounidenses retrocede casi un 20% en lo que va de año pese a la semana en positivo, pero eso no es garantía de nada en opinión de los expertos de Societe Generale. Los analistas apuntan que el índice podría caer hasta los 2.900 puntos en el próximo semestre, frente a los 3.800 puntos en los que se mueve el indicador en las últimas dos semanas.
La casa de análisis ha estudiado las valoraciones de mercado posteriores a las crisis desde 1870. El equipo de estrategas de Solomon Tadesse ha concluido que la actual valoración de mercado del índice se encuentra en una burbuja si se compara a las cifras prepandemia. "Las dinámicas del valor justo post-crisis aún requiere una corrección más profunda para alinear los precios actuales con el valor justo por fundamentales".
Así, aunque Societe Generale estima que la caída podría llegar hasta un 40% de los máximos de enero para situarse en los 2.900 enteros, la firma de inversión ubica su predicción en las 3.020 unidades para cuando acabe 2022.
De hecho, en cada una de las cuatro últimas correcciones del selectivo, la caída sí se ha aproximado al 40% y la duración del mercado bajista ha sido de unos 14 meses desde su arranque. Hace menos de dos semanas que el S&P 500 entro en mercado bajista, el 13 de junio.
Pero aunque el indicador no había caído tanto en el primer semestre desde 1970, otros analistas se muestran optimistas. Los expertos de Bank of America también se apoyan en la historia pero en sentido contrario. Auguran una caída hasta los 3.000 enteros hacia mediados de octubre, pero una recuperación fulgurante desde entonces que, salvo que el país entre en recesión, llevará al S&P 500 hasta los 8.900 puntos en febrero de 2028. Solo el tiempo dará y quitará razones.