Bolsa, mercados y cotizaciones
El Ibex está un 70% más endeudado que Europa ante la subida de tipos
- El selectivo español mantendrá controlado su apalancamiento hasta 2024 en las 2 veces...
- ... mientras las compañías dentro del Dax y del Cac seguirán recortando su endeudamiento
Sergio Fernández
Europa ha aprendido la lección de crisis pasadas y sabe que mantener una deuda elevada en tiempos convulsos puede provocar una hecatombe. La misma regla han aplicado los valores dentro del Ibex 35, en su conjunto, que ante la subida de los tipos de interés a ambos lados del Atlántico y con las palabras de recesión que arrastra el viento mantendrán su deuda controlada, aunque pueda encarecerse. El selectivo español ofrece una ratio de endeudamiento (deuda neta de todas las empresas del Ibex 35 entre el conjunto del beneficio operativo) de 1,9 veces al cierre de 2021.
Un nivel que se mantendrá casi sin cambios desde el año en curso hasta 2024, según lo que estima el consenso de mercado recogido por FactSet. Así, prevén que como mucho la deuda de las empresas del selectivo llegue a doblar el beneficio bruto (las 2,04 veces en 2023 será el valor más alto de los próximos años) que se obtendrá en estos ejercicios marcados, en el mejor de los escenarios, en una estanflación por el fin del dinero gratis. Un nivel que seguiría estando por debajo del promedio de los últimos diez años, de 2,44 veces teniendo en cuenta cómo se dispararon estas ratios en 2020 cuando los confinamientos paralizaron la actividad de las compañías y afectaron de manera negativa en sus beneficios en la mayoría de los casos.
No obstante, las compañías españolas vuelven a demostrar que no están tan bien preparadas como sus pares en cuanto a endeudamiento. El conjunto de los valores dentro del Stoxx Europe 600 parten de una ratio de 1,4 veces en el año de la recuperación tras la pandemia -2021- y para 2022 bajará hasta el 1,2. Es decir, que el mercado descuenta que el Ibex 35 estará un 70% más endeudado que la media de Europa, lo que puede jugar en contra de las compañías españolas, a pesar del atractivo que puede tener el selectivo español, por ejemplo, en cuanto al reparto de dividendos. Y es que ante las inminentes subidas de tipos que se avecinan en la zona euro mucha deuda no tiene por qué traducirse en un crecimiento asegurado.
El Ibex 35 tampoco está mejor posicionado si se compara índice a índice. El selectivo alemán, más pegado a la media europea, reducirá su ratio de endeudamiento de 1,4 veces con el que cerró el año pasado hasta situar el apalancamiento del principal referente de la bolsa alemana en una vez para 2024, según FactSet. Más sorprendente aún será la evolución de las compañías francesas, que parten de un apalancamiento inferior a una vez de media en los valores dentro del Cac y que casi se situaría con un ebitda acumulado que supere al total de su deuda.
Con los deberes hechos
Es oportuno recordar que una empresa endeudada no es necesariamente malo o contraproducente, ya que hay sectores en los que las inversiones o compras de activos son la principal forma de crecimiento que tienen. Por el otro lado, un exceso de que caja no es sinónimo de buena gestión ya que se da por sentado que el objetivo de una empresa es sacar rentabilidad a sus activos y la liquidez también es uno de ellos.
Valores como Repsol y Fluidra terminarán 2022 con los deberes hechos, con un endeudamiento controlado por debajo de las 2 veces y sin previsiones de que suban de aquí a 2024. Y otros como Indra, ArcelorMittal y Acerinox generarán caja con la que poder realizar inversiones sin necesidad de solicitar dinero prestado. En el caso de las acereras se explica por los beneficios de récord que se conseguirán en el año en curso gracias a los precios que está registrando esta materia prima en el contexto de la guerra de Ucrania y el cierre de las exportaciones rusas por las sanciones (ambos países se sitúan en lo más alto de la producción mundial de acero). Entre las empresas que seguirán generando caja se colocan ACS, Inditex y Laboratorios Rovi. El consenso de mercado recogido por FactSet eleva al cierre de 2022 la caja de la textil por encima de los 10.000 millones de euros (y seguirá por encima de esta cota dos años después).
En el lado de las compañías con la deuda menos controlada se sitúan Siemens Gamesa, Inmobiliaria Colonial y Merlin Properties. En el caso de las inmobiliarias, su alto apalancamiento responde a que su actividad se centra en la explotación y renta de inmuebles. El endeudamiento de Siemens Gamesa para 2022 será de más de 20 veces. Sin embargo, el mismo responde a un caso puntual por el ajustado ebitda que se espera de ella este año y a partir de 2023 arrojaría un ratio normalizado.
A las compañías que sí ha pillado la subida de tipos en EEUU -y pronto en Europa- con un pie cambiado ha sido a Iberdrola y a Telefónica. La primera cerrará el ejercicio en curso con una deuda por encima de los 43.500 millones de euros frente a los 33.400 de Telefónica. Y a pesar de que Telefónica recortará su deuda según avancen los ejercicios, lo cierto es que el mercado descuenta que su apalancamiento irá a peor en ambos casos. De hecho, Iberdrola ya ha visto cómo se ha encarecido su deuda por la subida de tipos en Brasil, donde está expuesta buena parte de su negocio.