Bolsa, mercados y cotizaciones
Wall Street pone fin a dos semanas de caídas, pero las pérdidas anuales se acercan al 10%
- Los índices terminan la semana en positivo, pero pierden mínimos de la semana pasada
- El bono estadounidense a diez años se sitúa en mínimos de hace 150 años
- El petróleo cae un 10% este viernes por el choque de Rusia con la OPEP
Xavier Martínez-Galiana, Carlos Simón García
El pánico bursátil se contagia a la bolsa americana. El Dow Jones cae un 0,98% en la sesión, hasta los 25.864 puntos; el S&P 500 pierde un 1,7%, hasta situarse en las 2.972 unidades, y el Nasdaq 100 baja un 1,63%, hasta caer a los 8.530 puntos. La comunidad inversora se refugia en la renta fija, haciendo caer su rentabilidad a mínimos históricos, mientras los principales índices de Wall Street frenan las caídas, terminan la semana en positivo, aunque pierden alrededor de un 10% en lo que va de año.
La situación crítica se vuelve crítica para las bolsas americanas y están a punto de confirmar el rebote del gato muerto. Los principales índices de Wall Street ya cotizan por debajo de los mínimos de la semana pasada. Y lo más preocupante es que se ha perdido el soporte clave del S&P 500 en 2.975 puntos.
"Esto abre la puerta a una vuelta a los mínimos de la semana pasada en los 2.850 puntos, donde se encuentra el soporte que no debe perderse si no queremos asistir a una caída hacia soportes críticos de medio plazo en los 2.730 puntos", señala Joan Cabrero, director de Estrategia de Ecotrader.
La volatilidad se ha disparado al término de esta semana. Ha alcanzado los 48,8 puntos, cuando solo hace dos días se encontraba en el nivel de los 31,9 puntos. Ahora, cerca de los 50 puntos, alcanza un nivel similar al que registró en marzo de 2009, en los albores de la crisis económica y financiera.
Además de las bolsas americanas, también cae Europa, con descensos de hasta un 4%, mientras la rentabilidad de los bonos se desploma con la deuda estadounidense a diez años en el mínimo histórico del 0,76%.
Según el economista y premio Nobel Robert Shiller hay que remontarse a 1871, casi 150 años, para ver un nivel tan bajo. El rally bajista de la rentabilidad del bono americano es el más grande desde la caída de Lehman Brothers.
El Dow Jones aún acaba con un saldo positivo del 1,8% en la semana, gracias a los dos días que terminó con subidas, igual que el S&P 500, que gana un 0,61%, y el Nasdaq 100, que avanza un 0,81%.
No obstante, en lo que va de año, el Dow Jones pierde un 9,37%; el Standard & Poor's se deja un 8%, y el Nasdaq 100, un 3,32%.
No es momento de claudicar
Ignacio Méndez, de Mirabaud, lo tiene claro: "Es momento de mantener e incluso comprar bolsa". "Lo que estamos viendo en el mercado de renta fija es que está cotizando una recesión y un panorama muy, muy negativo", pese a que admite que "todavía no hay información suficiente para saber si esto, una recesión, va a ocurrir o no y cuánto se propagará en el tiempo".
Daniel Seiler, director de multiactivos de Vontobel, recuerda que "sorprendentemente, los algoritmos cuántitativos, bendecidos por una visión sin emociones y sin prejuicios de los mercados, están comprando renta variable mientras que la mayoría de los inversores se están deshaciendo de los activos de riesgo".
Nuria Álvarez, analista financiera de Renta 4, señala que "de manera general habría que mantener posiciones y, a medida, que se vayan reduciendo los temores sobre una posible recesión y sobre todo que empiece a aminorar el nivel de contagio, haya una vacuna y los gobiernos empiecen a tomar medidas fiscales de mayor calado para hacer frente al impacto económico, habría que ir aumentando posiciones".
Asimismo, la experta admite que "las caídas han dado una oportunidad interesante de entrada en algunos valores, pero si la volatilidad va a seguir, aún pueden irse a niveles por debajo". Álvarez cita en concreto el caso de Telefónica y Santander, que a 5 y 3 euros, respectivamente, "no venderíamos, pero tampoco aumentaríamos exposición".
El petróleo se hunde: vuelve al precio de 2015 tras el desacuerdo de la OPEP
Los futuros del petróleo Brent se desploman un 9% con respecto al jueves, hasta caer a la zona de los 45,4 dólares por barril. Es su mayor caída diaria desde 2008 y no se veía este precio en el crudo de referencia en Europa desde junio de 2017.
En lo que va de semana, el Brent pierde un 10,2%, que se une al 13,6% que se hundió el precio del crudo la semana pasada. En lo que va de ejercicio, la caída ya es preocupante: un 31%. Pero aún podría seguir cuesta abajo, commo hizo en 2016 cuando llegó a caer hasta los 27,9 dólares por barril.
En la misma línea se comportan los futuros del West Texas: se desploman un 10,2% este viernes, hasta precipitarse a la zona de los 41,2 dólares por barril, y pierden un 8% en el conjunto de la semana. Eso después de perder otro 16% la semana pasada. En lo que va de año, el crudo estadounidense acumula unas pérdidas del 32,5%.
De ahí que las empresas del sector sean de las más bajistas de 2020. Marathon Oil pierde un 50% y cerca están Devon Energy, Noble Energy y Diamondback; Halliburton se hunde casi un 47% en lo que va de año; ExxonMobil se deja un 31% y Chevron, alrededor de un 22%.
"Las conversaciones de OPEP+ acaban en un fracaso dramático, augurando el fin de la alianza diplomática entre Arabia Saudí y Rusia que ha apuntalado los precios del crudo y ha modificado el equilibrio de poder en Oriente Medio", apuntan desde Bloomberg.
La Organización de Países Exportadores y Productores de Petróleo (OPEP) se reunió durante el jueves y el viernes de esta semana en Viena con países aliados como Rusia.
El representante de Moscú rechazó ceder ante Riad, que proponía profundizar en los recortes de petróleo con hasta 1,5 millones de barriles adicionales. "El presupuesto del Kremlin es más resistente a los precios bajos que sus aliados de Oriente Medio. Rusia también argumentó que el pretróleo barato ayudará a eliminar competencia del petróleo de esquisto estadounidense [shale]", comentan desde Bloomberg.
El oro se aproxima a los 1.700 dólares por onza
El metal está actuando como refugio ante el descalabro de la renta variable y una volatilidad disparada. La onza de oro cotiza en los 1.684 dólares, un 1% más que el jueves y un 7,5% más que lo que valía la semana pasada. Su rentabilidad anual supera ya el 10%. De este modo, batesu mejor marca del año y se acerca al máximo histórico que alcanzó en los 1.888,7 dólares el 22 de agosto de 2011.
"La sobreventa masiva de valores forzó a los inversores a aprovechar las ganancias en el oro para cubrir las pérdidas en la renta variable", subrayan desde Bloomberg. El mundo ha entrado en modo crisis y "los banqueros centrales del mundo están recortando tipos de interés más allá de los mínimos de la época de la crisis financiera, mejorando el atractivo del lingote", destacan.
En las circunstancias actuales, el euro aprovecha la debilidad del dólar para remontar. La divisa europea se revaloriza en torno a un 0,7% con respecto al jueves y se sitúa en la zona de cambio de 1,132 dólares.
Esto supone una subida del 2,7% en la semana y una apreciación del 1% frente al billete estadounidense en lo que va de año. El euro vuelve a niveles de julio de 2019, aunque todavía le queda camino hasta los 1,25 dólares que tocó en febrero de hace dos años.
Por su parte, la libra esterlina cede un ligero 0,2% este viernes y cae al nivel de 1,15 euros, lo que representa un retroceso del 1% en la semana. En el año, la libra se deprecia un 3% frente a la moneda común.