Internacional

Italia prevé retrasar las medidas de mayor gasto para ajustar el déficit

  • El Gobierno se fractura en plena negociación con Bruselas sobre el Presupuesto
Los vice primeros ministros italianos Matteo Salvini y Luigi di Maio. <i>Foto: Reuters</i>.

Giovanni Vegezzi
Milán,

El ministro de Economía de Italia, el tecnócrata Giovanni Tria, diseña estrategias para convencer a Bruselas de la buena voluntad del Gobierno transalpino, tras la demanda europea de revisar un plan presupuestario que podría llevar al país a un proceso sancionador. Entre sus planes se encuentra un eventual retraso de medidas que implican más gasto, como la renta básica.

A la reunión sobre la respuesta que Italia enviará este martes a Bruselas no acudieron ni el vicepresidente ni el líder del Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio, ni el propio Tria. El primer ministro, Giuseppe Conte, antes de volar a Palermo para presidir una conferencia sobre Libia, se reunió a solas con Matteo Salvini, vicepresidente y líder de la Liga. Según el portavoz del primer ministro, Rocco Casalino (que sigue protagonizando meteduras de pata y antes de entrar en el M5E se hizo famoso como concursante de la primera edición italiana del Gran Hermano), dijo que no estaba prevista ninguna reunión del Gobierno sobre las peticiones presupuestarias de Bruselas: "Estamos yendo a Palermo y mañana nos quedaremos allí". La estrategia de Conte parece ser usar la conferencia sobre Libia (que no contará con la participación de Donald Trump, Vladimir Putin ni Emmanuel Macron) para ocultar las tensiones de su Ejecutivo en las negociaciones con Europa.

Una opción es aplazar algunas medidas, empezando por la renta básica de ciudadanía

Italia, mientras su primer ministro hace como si nada, se enfrenta al riesgo de un procedimiento de infracción. Como es probable, Roma no revisará su plan presupuestario, el 21 de noviembre, empezando el recorrido sancionador que podría entrar en vigor el 22 de enero con el voto de los ministros europeos.

Según la prensa italiana, el tecnócrata Tria no para de trabajar para hacer planes presupuestarios alternativos y dar signos de buena voluntad a Bruselas. Una opción es aplazar algunas medidas, empezando por la renta básica de ciudadanía prometida por el M5E: un subsidio de 780 euros mensuales para las familias más pobres. Di Maio rechaza cualquier retraso en la aplicación de su más importante promesa electoral. Salvini, sin embargo, sería favorable a recortar el alcance de la renta básica promovida por su aliado: según las simulaciones publicadas este lunes por el diario económico Il Sole 24 Ore, los subsidios irían sobre todo al sur de Italia, mientras el bastión electoral de la Liga es el rico Norte.

Pero la renta básica no es lo único que separa a los dos aliados. La Liga sigue sosteniendo un pulso con el M5E sobre las infraestructuras ya que el Movimiento quiere parar varias obras y someterlas a un nuevo análisis de costes y beneficios, mientras el partido de Salvini -que gobierna varias regiones del Norte- pide la puesta en marcha de autopistas y líneas de alta velocidad cuanto antes.

La tensión escala y tanto analistas como diputados y senadores de los dos partidos no descartan elecciones anticipadas. Salvini sube en los sondeos y logra aumentar el consenso con una actitud ambivalente: se propone como líder más responsable que el inexperto Di Maio, pero no para de tensar la cuerda con Europa por fines electorales.

Pero el todos contra todos del Gobierno italiano deja sin resolver las problemas económicos, mientras los supervisores resaltan el excesivo optimismo de las previsiones del Ejecutivo. El lunes fue el turno del Instituto de Estadística, según el cual para cumplir con la meta del 1,2% de crecimiento anunciado para este año, "sería necesaria un avance del 0,4% en el cuarto trimestre". Sin embargo, la economía italiana se está ralentizando, haciendo prever "una fase de debilidad del ciclo económico".

Advertencia del BCE por la deuda

El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha advertido a Italia del elevado endeudamiento y le insta a cumplir las normas fiscales. Guindos asegura que en Europa hay preocupación por la sostenibilidad de la deuda, en el sector público y privado.

"Las fuertes reacciones del mercado a los acontecimientos políticos han creado nuevas preocupaciones sobre la conexión entre los bancos y la deuda soberana en partes de Europa", explicó Guindos, mientras advertía de que el contagio hasta ahora es limitado, pero "sigue siendo una posibilidad" que se produzca.