Barei vuelve a la música después de siete años alejada de los escenarios. La pandemia y su maternidad fueron el detonante de esta desaparición que se ha alargado más de la cuenta, porque llegó a pensar en tirar la toalla, no regresar como cantante y seguir solo como compositora. Acaba de lanzar Trece, su nuevo álbum, y Ya no va conmigo, su primer sencillo.
Hablamos con ella sobre el momento vital que atraviesa, su nuevo trabajo, completamente en castellano, y sobre su experiencia en Eurovisión que tan buen sabor de boca dejó entre los seguidores del festival con aquel Say Yay! de 2016. "Los eurofans son muy críticos, pero muy justos. Si lo das todo, te cuidan siempre", dice a Informalia Barei, que también opina sobre la elección de Melody como ganadora del Benidorm Fest. "Es una eurodiva, canta, baila y se lo merece mucho. Lo va a hacer genial". Eso sí, entiende las críticas de los que tachan de "antigua" la canción que llevará a Eurovisión. "Yo le hubiera hecho otra".
¿Por qué has tardado siete años en volver?
El parón surgió a raíz de ser madre, porque quería estar presente en la primera infancia y tenía posibilidad de hacerlo. He seguido haciendo cosas, componiendo para otros artistas, pero sin presionarme. También me pilló la pandemia. Había hecho un viaje tan hacia dentro que me apetecía volver poco a poco, sin presionarme, tampoco sabía desde dónde quería volver o si quería volver o no. Estaba perdida.
¿Llegaste a pensar en no volver?
Sí, sí. No a la música, porque a nivel compositivo siempre estaré, pero a nivel artista tenía cierto rechazo a la parte superficial de esta profesión. Sentía que podía seguir en la música sin exponerme tanto: si voy bien, mal, si me he maquillado, si engordo o adelgazo... Son presiones que nos ponemos nosotras mismas, porque yo no tengo por qué cumplir un estereotipo, pero no me apetecía enfrentarme a esa parte. Cuando sentí que lo podía llevar desde un lugar más sano, decidí volver.
Ahora cantas en castellano. ¿Eso te hace sentirte más expuesta?
Ha sido porque quería ser más honesta. Yo pienso y siento en castellano, perdía espontaneidad en inglés. Si quería hacer un disco honesto conmigo, lo mejor era hacerlo en castellano.
¿Te hace más vulnerable ante el público?
Sí, pero no es nada negativo. De hecho, me parece bonito mostrar nuestra vulnerabilidad. Es una fortaleza. Me gusta mostrar mis experiencias y que el público se sienta identificado, ser su espejo, porque todos surfeamos las mismas olas en momentos diferentes de nuestra vida.
En este proceso que has vivido los últimos años hasta volver a la música, ¿qué importancia ha tenido la maternidad?
Siempre he hecho lo que he querido en la música, pero lo que quería antes no tiene nada que ver con lo que quiero ahora. Lo que ha cambiado no es mi forma de relacionarme con la industria, sino la forma de relacionarme conmigo. Los valores me han cambiado y la escala de prioridades se han dado la vuelta. Soy diferente. Es una experiencia vital que le ha dado la vuelta a muchas cosas y ha influenciado en todo, como mi proceso de vivir la música, que ahora lo veo como un proceso más amoroso y saludable. Ahora me permito jugar y vuelvo a ser niña a la hora de crear.
Ruth Lorenzo dijo que cuando conectas con un eurofán, nunca te suelta de la mano... ¿Tú piensas lo mismo?
Los eurofans son muy críticos, pero son muy justos. Cuando saben que has hecho tu trabajo lo mejor que has podido, no te sueltan nunca, te van a cuidar siempre. Tienen mucho amor al festival, y cuando ves que tú también se lo has dado con tu trabajo, lo valoran mucho durante el resto de la vida.
Valoran que te tomes Eurovisión en serio, como tú lo hiciste.
Sí, son crítico y justos. Te dicen lo que les gusta y lo que no, pero cuando ven que coges sus consejos, intentas llevarlos a cabo, ser responsable y trabajadora... eso les vale más que cualquier numero.
¿Cómo viste el Benidorm Fest?
No vi la final entera, vi trozos, y me llamó mucho la atención Mel Ömana, me pareció espectacular, tiene una fuerza increíble. También me gustó Lucas Bun, porque me encanta la sensibilidad que transmite. Y Melody es la eurodiva: canta, baila y se lo merece mucho. Lleva toda la vida currando, es una artista independiente, como yo, se lo merece mucho y es muy buena persona, o al menos eso percibo yo. Todo el mundo merece cosas buenas, pero cuando es alguien que tiene un corazón tan bonito, más. Pisa el escenario como una diva de verdad, como dice su canción, una diva sencilla que no pisa a nadie. Lo va a hacer genial.
Hay quien dice que su canción es "antigua". No sé entiendes lo que quieren decir con esa crítica...
Lo puedo llegar a entender. Yo como compositora le hubiera hecho otra canción a ella. Y entiendo a lo que se refieren con eso, es una cuestión de sonido, de manera de expresar el mismo mensaje. Ese mismo mensaje con palabras distintas podría haber sido un poco más actual. O el sonido. Lo puedo entender. Pero cada artista viene de donde viene, tiene sus referencias, sus gustos... no puedes decir a una artista que haga algo que no vaya con ella. Como yo cuando fui en inglés, hubo gente que lo criticó, pero a mí me apetecía.
¿Qué consejo le darías a Melody?
Que no estamos operando a corazón abierto, no somos tan importantes, y cuando te quitas importancia, todo pesa menos y lo disfrutas más. Y que ponga límites a su equipo. Que deje claro que tiene que comer y dormir bien. Porque acabas no comiendo o durmiendo y eso pasa factura.
Tú tuviste que pelear mucho con TVE y te llevaste algún disgusto que otro...
Sí, pero esa pelea no fue con TVE. Había una persona que era un muro infranqueable, que era Federico [Llano, el que fuera responsable de Eurovisión en TVE], y le tengo mucho cariño a nivel personal. Pero a nivel profesional, era un muro, un "no" por delante. Pero no con TVE. De hecho, en TVE no estaba al tanto y se enteraron después.
¿Lo has hablado con Federico Llano?
No le he vuelto a ver, pero sí lo he hablado con otras personas de TVE, con las que me llevo genial, como Toñi Prieto. Pero son cosas que ni sabían a nivel interno.
Ahora ha cambiado mucho y TVE se toma Eurovisión mucho más en serio...
Ahora se le da cariño al artista, a la canción y a la puesta en escena.
Y dinero.
Es que dar dinero para esto es dar cariño, porque eso se traduce en cuidar lo que estas haciendo.
¿Te presentarás el próximo año al Benidorm Fest?
De momento no creo, aunque nunca digas de este agua no beberé.
¿No te quieres meter en ese lío?
Como compositora sí puede que me presente, pero a veces pienso que las cosas vividas por primera vez son más potentes. Y también pienso que hay mucha gente que quiere ir y hay que dar espacio y oportunidades a los demás.
Relacionados
- El gesto que Melody, ganadora del Benidorm Fest, incorporará en su coreografía de Eurovisión para homenajear a 'La Revuelta'
- Juan del Val, demoledor con Melody: desmonta su "historia de superación" y sentencia su futuro en Eurovisión
- Melody tuvo que ser atendida en el hospital de Benidorm antes de actuar: "Me asusté bastante"
- Melody ganó el Fest con el apoyo de su marido: escenas de su vida conyugal con Ignacio Batallán