TVE vuelve a la realidad de sus audiencias entre el final de la maravillosa Eurocopa ganada por la Roja y el comienzo de los Juegos Olímpicos. Un ejemplo lamentable está en el programa Hermanos a la obra, el espacio de Julio José Iglesias y su hermana Chabeli, que tras el estreno con el arrastre de los partidos no llega al 7%. Conchi Cascajosa recibe órdenes directas de Moncloa pero RTVE no ha comunicado oficialmente, tras la abrupta salida de José Pablo López, qué personas ni qué equipo toma y ejecuta las decisiones que pagamos todos los españoles, dado que la Corporación maneja un presupuesto milmillonario.
Sin embargo, sabemos que una de esas inexplicables (y carísimas) decisiones ha sido renovar por seis meses más su programa DCorazón. pese a su coste desproporcionado, su nula justificación como servicio público y sobre todo a pesar de sus desastrosos datos de audiencia. El formato, mucho mas caro y menos eficaz que el clásico espacio de crónica social, solo convence a la dirección de la pública, que ha decidido mantenerlo en la parrilla al menos hasta el próximo mes de diciembre, según nos confirman fuentes de la cadena. Y eso que desde que el pasado enero que se unió a Anne Igartiburu, Jordi González, el formato no ha logrado subir del 8% de share en una franja súper importante para la cadena, como es la antesala del Telediario, y que por culpa del espacio ha experimentado un bajón considerable. En las últimas semanas, gracias al incremento de audiencia media de La 1 con la Eurocopa, el programa ha logrado en alguna ocasión mantenerse sobre el 8%, la excusa perfecta para alargar esta inconcebible agonía y tratar por enésima vez de reflotar una hora que en los últimos años era muy rentable.
Recordemos que a Anne le sentó como un jarro de agua fría la noticia de la incorporación de Jordi González, porque consideraba que ese espacio era su programa. Pero la estrecha relación del catalán con el por aquel entonces director de contenidos, José Pablo López, hizo imposible una negociación. González llegó como una estrella a la pública pero se pegó un batacazo de los que hacen época con La Plaza, que tuvo que ser retirado, y después de empezar como presentador de Lazos de sangre, tras la salida de Boris Izaguirre, no obtuvo tampoco demasiados buenos datos de audiencia.
Salida de Terelu Campos
También ha dado mucho que hablar la relación entre Anne y el catalán. No es que hubiera mal rollo: es que ninguno de los dos sentía que necesitaba al otro para presentar un programa que a priori es muy simple. De hecho, coincidieron pocas horas antes de la presentación y después nunca más han vuelto a estar solos. "A ver: se llevan bien y son cordiales entre ellos, pero son como el agua y el aceite y eso se nota tras las cámaras y delante de ellas. No pegan ni con cola", dice una persona que les conoce muy bien a los dos.
Sea como sea, el espacio, a pesar de las dificultades, mantiene el respaldo de los jefes y, de momento, en los próximos meses le darán una segunda oportunidad para ver si remontan en audiencia. "La cadena les pedía un 10 y, bueno llevan semanas, en la mayoría de los días, por encima del 8% de share y eso les ha tranquilizado", nos dicen. Lo que no dicen es que en esos días la media de la cadena casi multiplicaba por tres ese dato gracias al fútbol. Quizás la salida de algunos colaboradores como Adriana Abenia o Terelu Campos, que empezaron, y la permanencia de otros, como Alba Carrillo, Pelayo, Euprepio Padula o Susana Jurado hayan logrado enganchar a la audiencia un poquito más cada día.