El Papa León XIV es el gran protagonista del último número de la revista Time, que le dedica su portada y un extenso reportaje titulado "Así se formó el Papa". El reportaje destaca su humildad, su compromiso con la renovación pastoral y su firmeza en cuestiones sociales y dice que, a sus 69 años, León XIV representa una nueva etapa en la historia de la Iglesia: la de un Pontífice con alma de pastor, mente de académico y corazón de misionero.

Por primera vez en décadas, el semanario estadounidense vuelve a volcar su atención sobre un Pontífice, y no es para menos: se trata del primer Papa originario de Estados Unidos en los más de dos mil años de historia de la Iglesia católica. Un hombre de perfil discreto, pero con una biografía fascinante que ahora sale a la luz.

La imagen de portada muestra una entrañable fotografía en blanco y negro de 1959: un pequeño Robert Prevost —hoy León XIV— con cuatro años, rodeado de sus dos hermanos y de su madre Mildred, elegante y sonriente. A través de ese retrato íntimo, la periodista Belinda Luscombe reconstruye con detalle el camino que llevó a aquel niño nacido en un suburbio obrero de Chicago a convertirse en el sucesor de San Pedro el pasado 8 de mayo.

Desde sus primeros años, Robert Prevost destacó por su inteligencia y por una clara inclinación hacia la fe. «Nadie le impuso nada. Fue su decisión», afirma su hermano John, entrevistado por Time. La familia Prevost vivía la religión con naturalidad: su madre, bibliotecaria, cantaba en el coro de la parroquia, y su padre, veterano de la Segunda Guerra Mundial, había considerado el sacerdocio antes de dedicarse a la educación pública. Ya de niño, Robert celebraba "misas" en casa sobre la tabla de planchar y repartía sacramentos imaginarios a sus hermanos. Una vecina incluso llegó a vaticinar su destino: «Algún día serás Papa». Una anécdota que se convirtió en broma familiar… hasta que se hizo realidad.

En 1967, a los doce años, ingresó en el seminario menor agustino de San Agustín, en Holland (Michigan). Allí se curtió en una estricta rutina de estudio, oración y vida comunitaria. "Era el más inteligente de todos", recuerda el padre Becket Franks, excompañero suyo. "Nos ayudaba con los deberes, especialmente en idiomas y matemáticas. Ya dominaba el francés en secundaria". Posteriormente, estudió Matemáticas y Teología en la Catholic Theological Union de Chicago, en pleno post-Concilio Vaticano II, una época convulsa que marcaría su pensamiento. Entre sus compañeros se encontraba Ezechiele Ramin, misionero asesinado en Brasil y actualmente en proceso de beatificación.

La vocación misionera llevó a Robert Prevost a Perú, donde trabajó durante años entre las comunidades más humildes. Su cercanía con los pobres, su formación rigurosa y su carácter dialogante lo convirtieron en una figura muy respetada dentro y fuera de la Iglesia. En 2023, fue nombrado prefecto del Dicasterio para los Obispos. Dos años después, en un cónclave breve y sin sobresaltos, fue elegido Papa bajo el nombre de León XIV.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky