Un año después de que finalmente apresaran a su ex, Carlos Navarro 'El Yoyas', tras darse a la fuga de la prisión de Brians 2, donde cumplía condena por violencia machista contra Fayna Bethencourt y sus hijos, la exconcursante de Gran Hermano vuelve a respirar tranquila. De hecho, no solo atraviesa una buena etapa personal, sino también profesional.
La canaria ha informado a través de su perfil de Instagram que se ha sumado a Pop Management, agencia que va a comenzar a representarla. Una unión que ha derivado en "un nuevo proyecto de ficción que se rueda entre Gran Canaria y Madrid" y en el que Bethencourt tendrá un papel como actriz.
En su publicación, ha reconocido que está encantada de volver a explotar su faceta como intérprete: "¡No puedo estar más feliz! Muchas gracias". Sus seguidores no pueden esperar a conocer más detalles de este nuevo proyecto. "Qué intriga", "Te deseo mucho éxito" o "El trabajo desde la humildad y la empatía siempre tienen premios y logros", son algunos de los mensajes que se leen en el tablón de comentarios.
Cabe decir que esta no es la primera vez que Bethencourt se atreve con la interpretación, pues en otoño de 2024 presentó No lo llames amor, una obra de teatro social que, además de entretener, generaba conciencia sobre la violencia de género.
La artista también es colaboradora en Hay que verlo, programa de la Radiotelevisión Canaria, a la vez que copresenta el podcast No, qué va, que recientemente recibió el premio a Mejor Podcast de Canarias. Además, tal y como contó en su aparición en Equipo de investigación, también es agente inmobiliaria y madre dedicada. Hace un tiempo, durante su relación con Carlos Navarro, esto era impensable para ella.

De Gran Hermano a la violencia silenciada
La historia de Fayna y Carlos Navarro comenzó ante las cámaras en la segunda edición de Gran Hermano en el año 2001. Su relación se hizo mediática desde el principio, pero lo que en la pantalla parecía un romance peculiar escondía una realidad oscura. De hecho, Navarro fue expulsado del programa de manera disciplinaria por un episodio de violencia verbal contra Bethencourt, un hecho que, aunque entonces no tenía un nombre concreto, hoy es identificado claramente como violencia machista.
Tras salir del programa, continuaron su relación durante 16 años, un período en el que Bethencourt vivió una espiral de control, manipulación y, finalmente, agresiones físicas. "El aislamiento se produjo de una manera casi imperceptible al principio, incluso prohibiéndome ir a sitios tan básicos como una farmacia", llegó a relatar la artista.
Cuando Bethencourt decidió denunciar, Navarro fue condenado por la justicia en 2022. Se le impuso una pena de cinco años y ocho meses de prisión por los delitos cometidos contra ella, sus hijos y la nueva pareja de la canaria. Sin embargo, en lugar de ingresar en prisión, El Yoyas optó por huir y permanecer en paradero desconocido durante más de un año, hasta que fue localizado y detenido en diciembre de 2023.