Cayetano Martínez de Irujo protagonizaba la primicia de Informalia cuando, el pasado 21 de mayo, adelantábamos que la madrina de su boda con Bárbara Mirjan será su hija Amina y desmentíamos la aparente discusión que media España vio entre los prometidos en la hípica.
Una semana después, la revista Hola confirma nuestras exclusivas: señala que Eugenia no será la madrina (por ahora, matizan), aunque también sugieren que habrá que esperar para saber quién ocupará ese lugar, sin descartar a la propia duquesa de Montoro. De lo que no dice nada el semanario es de los desencuentros entre Cayetano y su hermana, ni de lo que el duque de Arjona comenta en privado sobre su cuñado, Narcís Rebollo.
Por supuesto, y como ya estamos acostumbrados a leer en medios oficialistas, tenemos la versión 'algodón dulce' de todo: aseguran que Eugenia "está encantada con la boda de Cayetano y que su relación con ellos es magnífica tanto en público como en privado". Vamos, "maravillosa".
Pero bueno, recordemos que Genoveva Casanova estuvo con Federico de Dinamarca en Madrid, supuestamente para hacerle un favor a un amigo enfermito y enseñarle al marido de Mary Donaldson unas obras de arte cerca de El Retiro.
La cuestión es que, si todo va según lo previsto y no hay sobresaltos, el próximo 4 de octubre Cayetano Martínez de Irujo y su prometida, Bárbara Mirjan, se casarán tras una década juntos.
"Aún no está decidido", responden fuentes no identificadas a la revista del saludo cuando se les pide confirmación sobre si será efectivamente Amina, la hija del novio, como nos contaron en este portal.
Lo que sí parece claro es que el semanario que dio la noticia de la boda confirma otros aspectos adelantados por Informalia, como la iglesia y la finca de la novia. Además, añaden que el vestido de novia será firmado por Navascués.
La historia de encuentros y desencuentros entre la duquesa de Montoro y su hermano es larga, y basta con revisar hemerotecas o hacer una búsqueda en Google sobre las idas y venidas de Cayetano y su única hermana para entender la relación entre los dos hijos más jóvenes de la duquesa de Alba, especialmente desde la muerte de su madre hace ya una década. Más allá de sus buenos y malos momentos, resulta casi cómico leer frases como que Eugenia "está volcadísima desde el minuto uno en los preparativos y que la boda, de por sí, le hace muchísima ilusión, la elijan o no como madrina". ¡Qué bonito!
Dan ganas de ponerse a cantar aquella canción de Viva la gente ("la hay donde quiera que vas").
No dudamos de que para Cayetano es importante que su querida hermanita Eugenia esté en la boda. Pero esta no será en la finca de Eugenia (donde se celebró la puesta de largo de Tana), sino, como anticipó Informalia, en la finca de Cayetano: Las Arroyuelas, situada a las afueras de Sevilla. Allí tendrá lugar también la ceremonia religiosa, ante el Cristo de los Gitanos, en la iglesia que alberga los restos mortales de Cayetana de Alba.
Porque Cayetano puede casarse ante Dios gracias a que su boda con Genoveva (quien, como también adelantamos, no está invitada) no existió —es un decir— o, mejor expresado, está anulada. Resulta paradójico que una hija fruto de ese primer matrimonio anulado ante la Iglesia pueda ejercer de madrina, aunque el sacramento del matrimonio, según el derecho canónico, no requiere padrinos, sino testigos.
Por supuesto, las fuentes del entorno de Cayetano y Eugenia niegan categóricamente cualquier desencuentro, con la misma convicción con la que Nerón aseguraba que se estaba pesando cuando le pillaron encima de una romana en llamas.
Eso sí, Eugenia ha mostrado públicamente su complicidad con Bárbara Mirjan, quien es apenas unos años mayor que su hija Tana y puede aportar su experiencia en la organización de eventos como el de esta boda, en la que —nos insisten— la familia de Bárbara correrá con la mayor parte de los gastos del bodón.