La confesión de Nicole Kidman en su película más erótica: "Tuve que parar el rodaje porque no soportaba más orgasmos"

La actriz australiana empalma un éxito tras otro y su próxima película ya ha sido definida por la crítica como "sexy", "inesperada" o "sensacional". En resumen, "la mejor película del año". Llega a España el próximo 17 de enero pero el equipo ya ha comenzado la campaña de promoción y la protagonista, Nicole Kidman, ha concedido una entrevista en Variety para ir abriendo boca: "Estaba tan excitada que tuve que parar el rodaje en varias ocasiones, ya no quería tener más orgasmos", ha dicho.

Lo de Dakota Johnson en Cincuenta sombras de Grey se va a quedar en un chiste porque Kidman ha arriesgado fuerte con Babygirl, el thriller erótico en el que comparte pantalla con Antonio Banderas, que interpreta a su marido, y Harris Dickinson, que da vida a un becario con el que la protagonista tiene una tórrida aventura. "En algún momento pensé que no quería ser tocada, no quería continuar, pero al mismo tiempo sentía una compulsión por seguir adelante. Fue casi como un agotamiento", ha confesado Kidman.

Afirma que el rodaje no ha sido nada fácil por el alto contenido erótico y la complejidad de los personajes, aunque asegura que la complicidad del equipo y sus compañeros la ayudaron a dar lo mejor de sí misma: "Se necesitaba una enorme cantidad de confianza para crear la dinámica. Todos fuimos muy amables entre nosotros".

La actriz, casada con el músico Keith Urban desde hace 18 años, ya ha recibido el primer galardón por Babygirl: la Copa Volpi a la Mejor Actriz en el Festival de Venecia. No pudo recogerlo, pues horas antes de la gala recibió una terrible noticia: el fallecimiento de su madre. "Mi hermana y yo junto con nuestra familia queremos daros las gracias por la demostración de amor y bondad que hemos sentido esta semana. Cada mensaje que hemos recibido de aquellos que amaron y admiraban a nuestra madre ha significado más para nosotros de lo que nunca podremos expresar", dijo emocionada.